Capítulo 030

Las sábanas dibujaban sus figuras y con sus manos entrelazadas, ambos se permitían una entrega hacia la otra persona, que nunca se habían permitido antes. Cada vez que Alejandro se deslizaba dentro de Daniela, los gemidos se agudizaban y el sudor se volvía dulce en sus paladares, al probar y explorar sus pieles. Cerca de un nuevo clímax, el vaivén se endureció levemente, intentando llegar más profundo, hasta donde nadie pudo llegar...

Alex entró en ella por última vez antes de rozar las estrellas, juntos, cogidos de las manos y

mirándose a los ojos. Alejandro se dejó caer a un lado y arrastró a su novia consigo, poniéndola sobre él…

ALEX: (No podía dejar de sonreír y la acariciaba el rostro) ¡Wow, Dani, eres la mujer más increíble del mundo! No había sentido nada como esto en toda mi vida, lo que me das es indescriptible...

DANI: Eres tú quien me hace ser así...

ALEX: Nada de eso, amor, lo que llevas dentro está en ti, no en mí. (Le da un piquito) Debe ser que nunca volviste a confiar lo suficiente en nadie como para permitirte mostrarte tal como eres. Conmigo siempre podrás ser Daniela, sin máscaras ni recelos, porque te amo completita, fíjate y no te cambio un solo cabello de esa melena preciosa que tienes...

DANI: ¿Ni uno solo? Jajajaja, dile eso a Sam y verás cómo se ríe de ti, jajajaja... Te amo, licenciado de mi corazón (Lo besa) Y no voy a dejar (Beso) de amarte...

ALEX: Ni uno solo y Sam, puede dar misa en el Vaticano si quiere. Yo se mi cuento, Daniela y no te cambio nada porque así eres y así me enamoré de ti... No me imagino una vida en la que no me enamore más de ti a cada momento. Eres la respuesta a mis plegarias, soñé tantas veces con sentirme así.

DANI: Yo nunca pensé que me iba a permitir sentir lo que estoy sintiendo, tú sacas todo lo bueno de mí, te amo...

ALEX: Y tú haces que quiera ser mejor hombre cada día, hermosa, me haces sentir que todo lo puedo, que no hay imposibles y que para ser feliz, sólo te necesito a ti y a nuestros salvajitos. El día que eso se amolde, Dani, nada nos va a detener y ese momento, va a llegar, te lo prometo.

DANI: No prometas nada, por favor, estoy cansada de promesas...

ALEX: Mmmm, bueno, no te prometo nada, siempre y cuando la que haga una promesa conmigo aquí y ahora, seas tú...

DANI: ¿Qué promesa?

ALEX: (Se miran a los ojos fijamente) Que sin importar lo que parezca, lo que podamos creer que es o lo que creamos que puede llegar a ser, pase lo que pase, siempre vamos a hablar las cosas, sin tomar decisiones estando enojados, celosos o molestos. Prometamos que siempre, los dos, vamos a tener la capacidad de escucharnos y de confiar en nuestro amor, que es tan real como tú y como yo. ¿Promesa?

DANI: Yo no prometo, Ale, pero te lo juro por mi hija y por nuestro amor (Lo besa)

ALEX: Es un juramento mutuo, entonces... (Ella lo besaba mucho) Mmm, amo tus besos, mi amor, bésame más...

La noche continuó su marcha y poco antes de mediodía, la pareja se decía adiós en el aeropuerto de la isla...

ALEX: Va a ser horrible dormir sin tu aroma en mi almohada, Daniela Villalta... Ahora que probé la miel, jum, ¿cómo vuelvo a dormir sin ti, eh?

DANI: (Abre la maleta y saca una prenda, se la ofrece a su novio) Toma, puedes dormir con ella y es como si yo estuviera a tu lado...

ALEX: (Hace lo mismo y le da la camisa que ella había usado para acostarse) Aunque no me lo pidas, te doy mi camisa favorita para que sientas que son mis brazos los que te rodean en las noches...

DANI: Te voy a extrañar hermoso...

ALEX: También te voy a extrañar, amor de mi vida... (Se miran y él recuerda algo) ¡¡Ahhh!! Toma mis calzones... (Le guiña el ojo) Así por allí abajo también me recuerdas, por lo que soy yo, no me olvido ni con amnesia de este fin de semana...

DANI: Jajajaja, ¡quédate con eso, menso! No nos vamos a olvidar de este viaje, ninguno de los dos... (Lo besa) Me tengo que ir, Jana debe de estar esperándome...

ALEX: Y Gabo a mí, pero quédatelos, por favor... (Mete los calzones en la maleta de Dani) Así, alguna noche loca, los luces para mí... Te amo. Hablamos en la noche, hermosa, disfruta a tu princesa...

DANI: Y tú a tu súper GABO. Te amo (Se despidieron con un beso en que pusieron todo su ser y cada uno se fue a su casa)

Ese mismo domingo, pero por la tarde, mientras Jana dormía la siesta felizmente con su mamá, Sam verificaba algunas cosas del trabajo, hasta que la música, comenzó a llegar desde la calle. Su celular recibió un mensaje de texto que decía "Asómate". La mujer no podía creer que ese tipo no cesara en sus tarugadas, porque al ir hasta la ventana y ver qué sucedía, se encontró con Andrés, acompañado de mariachis. La canción era "Contigo en la distancia". Daniela y Jana despertaron y la obligaron a bajar y dar la cara, por lo que Samanta no tuvo otra opción más que la de obedecer...

SAM: ¿No te cansas?

ANDRÉS: Nouuup...

SAM: Pues yo sí, ¿qué te crees que estás haciendo? (Si seguía así, no se iba a poder a resistir)

ANDRÉS: Lo que siento, Sam, lo que te dije que iba a hacer: demostrarte que con tal de merecerte, cambio mi vida por completo. (Se acerca unos pasos)

SAM: No te acerques...

ANDRÉS: ¿Por qué no? (Dio un paso más)

SAM: Por que no...

ANDRÉS: Esa no es una razón, Samanta... ¿Tienes miedo de reconocer que sientes algo por mí, acaso? (Un poco más cerca)

SAM: No, no siento nada por ti, sólo quiero que no te acerques, no me agrada tu acercamiento...

ANDRÉS: (Da dos pasos y queda pegado a ella) Si no sientes nada por mí, ¿por qué estás temblando? (Le da un beso)

SAM: No estoy temblando y ni se te ocurra besarme de nuevo (Se aleja) Tus besos saben a traición y yo no beso labios traidores...

ANDRÉS: (La vuelve a besar) No te traicioné. Si, me equivoqué en estar queriendo salir contigo y andar con otras, es cierto, pero no hubo traición ni la habrá. Eres tú, Sam, no quiero a nadie más que a ti...

SAM: No dije que me traicionaras a mí, porque no me importa, sólo dije que tus labios son traicioneros y mentirosos y yo no juego ese juego (Se aleja)

ANDRÉS: (La toma del brazo y la detiene) No estoy jugando, voy en serio contigo

SAM: No te creo y suéltame...

ANDRÉS: Entiendo que no creas en mis palabras, porque me lo gané, pero en mis actos, vas a creer... (Se vuelve a acercar y se pone a un tiro de su boca) Mi amor es verdadero y algún día, lo vas a entender... (La suelta, pero no se mueve ni un milímetro)

SAM: ¿Verdadero? ¡JA! Tú no dices nada de verdad, nada que tenga que ver con mujeres, conozco a los hombres como tú y ninguno ha cambiado

ANDRÉS: Pues seré el primero, Morena divina (Ella tampoco se había movido) Y tú, serás la razón de ese cambio

SAM: Hasta no ver, no creer...

ANDRÉS: (La toma de la cintura y la besa tiernamente y aunque Sam no se mueve, responde al beso con sus labios) Esa boca será la única a la que bese por el resto de mi vida

SAM: Eso quiero verlo (Actuaba como si el beso no le hubiera movido un pelo, pero la verdad es que le había movido el piso entero)

ANDRÉS: Lo vas a ver... (La besa de nuevo) No habrá otros labios para mí, Morena... (Se aleja y vuelve con los mariachis) ¡Échense otra, muchachos!

Sam se queda mirándolo y sin darse cuenta, sonríe, Andrés iba por buen camino y eso no se podía negar. Desde atrás del grupo de mariachis, aparece un muchacho con un enorme ramo de rosas y se las entrega a Sam. Terminada la canción, Andrés le manda un beso volador y se va con los músicos...

En la noche, después de cenar y de dormir a Jana, de bañarse y dejar todo listo para el día siguiente, Daniela se acostó para dormirse ella, pero no conciliaba el sueño. Daba vueltas en la cama sin poder quitar de su mente las horas junto a Alex. Como si estuviera leyéndole el pensamiento, Alejandro le envió un sms, preguntando si podía llamarla...

DANI: (Leyó el mensaje y respondió "No puedo dormir pensando en ti, si no me llamas tú, lo hago yo") ¡Ay, Ale!

ALEX: (La llama) Hola, hermosa, no me dejas dormir, mi amor...

DANI: Tú a mí tampoco... Es una pena que sea muy tarde para ir a verte

ALEX: ¡Y justo ahora que estoy solito! ¿Me creerías que Gabo se fue con su tío Toro porque salen de pesca? No pude impedirlo ni sabiendo que mañana hay escuela...

DANI: Ven a verme...

ALEX: Mira por la ventana... (Alex estaba ahí parado, junto a su motocicleta)

DANI: (Se asoma y lo ve, va a su habitación, se pone una bata y baja al portón, abre y se abalanza sobre Ale) ¡¡Hola, guapo!!!

ALEX: (Se deja abrazar y besar) ¡Hola, hermosa! (Otro beso) No podía dormir y mírame, vine a verte, aunque sean unos cuantos minutos, Dani... Te has metido en cada rincón de mi ser...

DANI: Yo moría por estar contigo…

ALEX: Aquí me tienes, amor... (Se quita la chamarra y se la pone a ella) ¡Hace frío! (Beso) ¿Qué hacías?

DANI: Pensaba en ti... Ven (Lo arrastra dentro del portal) Aquí no hace frío...

ALEX: (Va con ella) Cuando estoy contigo, no existe el frío, hermosa.

DANI: Jajajaja, lo so (Lo besa apasionadamente) Vamos...

ALEX: ¿A dónde me quieres llevar, Daniela? ¿Te vas a abusar de mí? ¡¡Di que si!!

DANI: Jajajaja, vamos a mi departamento

ALEX: (Suben y hablan en voz baja) ¿Jana y Sam duermen?

DANI: Si, pero ven (Lo lleva a su cuarto) Quédate aquí (Sale)

ALEX: (Comienza a mirar alrededor y ve una foto de Dani con una bebita en brazos) ¿Así que tú eres la pequeña princesa? (Intenta ver si hay alguna fotografía con la niña más grande y divisa una enmarcada, arriba de la cama, colgada de la pared. La toma) Eres igual a tu mamá...

DANI: (Entrando) ¿Quién es como su mamá?

ALEX: (Le muestra la foto) Esta mini Dani... Es hermosa, igual que tú

DANI: ¿La quieres conocer en persona? (Le ofrece la mano) Ven...

ALEX: ¡Claro! (Le toma la mano y salen)

DANI: (Van hasta la habitación de Jana y entran sin hacer ruido para no despertar a la niña) Aquí está

ALEX: (Se acerca despacio y la observa. Le acaricia la frente y se queda ahí. Le susurra a Dani) Es preciosa.

DANI: Con la madre que tiene, ¿qué esperabas?

ALEX: (Seguía mirando a Jana) Ahora te entiendo mucho más, esta pequeña es especial. Te felicito, Dani, tu hija es divina. (Mira a su novia) Yo quería que Gabo fuese una Gaba, jajajaja... (Jana se mueve y Alex se aleja un poco)

DANI: Vamos (Salen del cuarto) ¿Cómo que querías una niña?

ALEX: Si, quería una niña, porque si tenía un niño que saliera revoltoso como yo, me las iba a ver negras... (Se quedan hablando en el pasillo) No se, supongo que por los recuerdos de mi hermana de pequeña o por mi sobrina, cuando supe que Laura estaba embarazada, sentí que sería una mujercita, pero me salió ese renacuajo maravilloso. (La mira y se ríe) Si supieras el nombre que le iba a poner, no me lo crees...