Capítulo 165

En el hospital, Nau, Gise y Alberto, hablaban de lo mismo. Nadie se lo creía y eso que ellos no lo habían conocido mucho...

NAU: No quiero ni pensar en lo que siente la hermana de Alex. Se los veía tan felices...

GISELLE: Pobrecita, debe de estar destrozada...

ALBERTO: Eso ni lo dudes...

NAU: ¿No existe chance que se haya salvado?

ALBERTO: Hasta donde nos dijo tu hermano, el helicóptero explotó en el aire, Nau...

NAU: Ojala y sea uno de esos milagros, papá, porque esa gente no se merece que les pase esto

ALBERTO: Tu cuñado también debe de estar destrozado, no sólo era su cuñado, si no, además, uno de sus mejores amigos...

GISELLE: Y del marido de tu prima, también...

NAU: Ellos eran amigos desde que tenían la edad de Jana y Gabo

ALBERTO: Es cierto, con el abogado que lleva tu caso, hijo, Andrés... ¡Qué desgracia, Dios! No puedo ni pensar en esos padres...

NAU: Es un golpe muy duro de superar, yo no se qué haría en su lugar...

ALBERTO: Nadie sabe, hijo, sólo cuando esas cosas suceden es que uno reacciona y como puede, no hay manera de prepararse para semejante golpe...

NAU: Mañana que me dan el alta, tenemos que ir a verlos...

GISELLE: No, amor, tienes que hacer reposo

NAU: No me voy de fiesta, Giselle, pero después de lo que Alex ha hecho por mí y por mi familia, lo mínimo que puedo hacer yo, es estar con él. Una vez me dijo que siempre soñó con tener un hermano varón más pequeño y que Nano y yo, hacíamos que sintiera que ese sueño se cumplía y Alejandro se ha comportado como un gigante. Nosotros no podemos fallarle

ALBERTO: Mi hijo tiene razón, Giselle. Con cuidados, Nau puede ir a verlo y así lo haremos, campeón...

En casa de los padres de Martín, Maru y Bautista se estaban despidiendo

BAUTISTA: Yo me encargo de todos los trámites que haya que hacer, Don Vicente, usted quédese junto a su familia

EZEQUIEL: Voy contigo

VICENTE: Hijo, no lo hagas

EZEQUIEL: ¡Es mi hermano y se lo debo!

VICENTE: Es mejor que no vayas, hijo…

EZEQUIEL: Quiero y voy a ir, papá, no voy a dejar a mi hermano ni estando muerto...

MARGARITA: (Vicente iba a negase, pero ella lo impidió) Chente, déjalo, eso lo va a hacer sentir mejor (Besa la frente de su hijo) Ve, mi amor...

EZEQUIEL: Nada me va a hacer sentir mejor, mamá, salvo que me lo devuelvan sano y salvo... (Sale con el matrimonio)

ANA: (Abraza a su mamá) Ven, mamita, sabes cómo es Eze y cómo se lleva con Martín...

LUCÍA: (Hace lo mismo con su papá) Ven, viejito...

Ya fuera de la casa, el matrimonio Zavala - Burak acompañados por el mayor de los Ledesma...

EZEQUIEL: ¿No hay manera que haya sobrevivido? Hay que buscarlo por todos lados...

BAUTISTA: (Se frena y lo mira a los ojos) Según nos explicaron, no, Ezequiel, lo siento.

MARU: Lo mismo pregunté yo, pero...

EZEQUIEL: No, hay que buscarlo, ¿y si saltó antes que explotara? No me puedo resignar...

MARU: (Su embarazo la tenía demasiado sensible y no pudo contener su llanto y lo abrazó) Entiendo, Ezequiel y si, hay que agotar todas las posibilidades. Amor, ve a empezar los trámites que yo lo acompaño al helipuerto para ver qué se puede hacer

BAUTISTA: Está bien, vayan, pero me la cuidas, Ezequiel...

EZEQUIEL: No te preocupes...

El grupo se dividió y se fueron con el rumbo fijado. Por otra parte, en casa de Tami, Alex le había preparado algo de comer a su hermana. Dani aún no llegaba y Tamara no abría la puerta de su recámara...

ALEX: Por favor, Tata, tienes que comer. Se que no quieres, hermosa, pero la bebé necesita que te alimentes

TAMI: No quiero comer, ¡déjame en paz, lárgate! Quiero estar sola... (Gritaba, mientras las lágrimas no dejaban de recorrer su rostro)

ALEX: ¡Basta, Tamara Valentina! Piensa en tu hija, ¡carajo!

TAMI: Deja la comida en el suelo y lárgate, ¿no entiendes que quiero estar sola?

ALEX: ¡No, no lo entiendo!

TAMI: Pues que se te meta en la cabeza, quiero estar sola. Cuando se murió Laura, yo te dejé solo porque me lo pediste, ahora respétame tú a mí...

ALEX: Es distinto, yo no amaba a Laura... Sólo come, Tata, por favor...

TAMI: Como cuando te largues y me dejes sola...

ALEX: No me pidas eso, no puedo dejarte sola, te necesito también...

TAMI: Yo necesito a mi marido, pero no está. Vete con Daniela, no pierdas tu tiempo conmigo...

ALEX: No pierdo mi tiempo, niña, ¿qué mierda estás pensando? Se que estás muy mal, pero dejarte morir de tristeza, no es la solución. ¿Sabes cuántos años tengo? Treinta y, ¿sabes cuántos de esos años compartí con Martín? 25, Tami, se que te duele, pero que me eches de tu lado, no lo va a revivir...

TAMI: Lo se, pero quiero estar sola, con mi dolor, lo necesito. Por favor, vete, desahógate con Daniela, yo no te sirvo...

ALEX: (Patea la puerta con coraje) ¡¡Aquí te dejo tu comida!! Pero ni creas que te voy a dejar sola, ni aunque me quieras sacar a patadas.

TAMI: (Abre la puerta y coge la comida) Sólo voy a comer por ella, nada más tiene sentido ya...

ALEX: (En la sala, tomando un café, mira al cielo) ¿Te tenías que morir, menso? ¿Dejarlas así?

DANI: (Toca a la puerta y Alex abre) Hola, mi amor (Lo besa) ¿Cómo está?

ALEX: Mal, no quiere estar con nadie y apenas pude hacer que coma algo, creo...

DANI: ¿Cómo qué crees? ¿Y tú cómo estás?

ALEX: Le tuve que dejar la comida junto a la puerta porque no me abría, supongo que la cogió y yo, no se, Dani, estoy como puedo

DANI: Estás mal, lo se (Lo abraza) Estoy aquí, contigo, desahógate...

ALEX: (La abraza, pero contiene el llanto) No lo puedo creer

DANI: Porque es increíble, un fallo lo arruina todo...

ALEX: Ajá... (No la soltaba, la tenía agarrada fuerte)

DANI: Llora, amor, desahógate. Hazlo ahora, no te lo guardes...

ALEX: No quiero llorar, Dani, porque si lloro, se vuelve real...

DANI: Es real y tienes que aceptarlo, si no lo haces, va a ser peor...

ALEX: (Se reprimía) Tengo que poder aguantar, Tami me necesita entero

DANI: Tami te necesita desahogado, no reprimiéndote...

ALEX: (No lo resiste más y se echa llorar, abrazándola como nunca) ¡Van a ser padres, amor! Como lo soñaron, ¿por qué la vida les hace esto?

DANI: (Lo abrazaba fuerte) A veces la vida es muy injusta, pero al menos, Martín, le dejó un recuerdo imborrable a tu hermana...

ALEX: Pero no va a conocer a su hija, con lo que deseaba que Tami lo hiciera papá...

DANI: Él, desde allá arriba, las va a cuidar y a proteger...

ALEX: (Se suelta) Eso no es consuelo. Tendría que estar aquí, Daniela, con ellas, disfrutándolas, amándolas... (Se sienta pesadamente en el sillón)

DANI: Lo se, amor, pero él no eligió esto...

ALEX: Ya se, Cosita, pero tengo rabia, dolor, impotencia y un coraje... Tanta lacra dando vueltas, ¿y se tiene que morir él? Un tipo bueno, generoso, que vivía por y para su mujer... (No dejaba de llorar) Ellos eran felices, amor, se esperaron durante años y ahora que estaban juntos, bien, enamorados y que hay una criatura en camino... (Se agarra la cabeza y la agacha, derrotado)

DANI: Lo se... No te martirices más...

ALEX: No puedo pensar, Dani, mi cabeza es una bomba. Estoy tratando de no alterarme, no quiero que mi corazón me haga una jugarreta, pero estoy por estallar en mil pedazos... Es mi hermanita, amor... (Suena el celular de Dani, era Maru)

MARU: Munita, ¿estás con Alex?

DANI: Si, ¿qué pasó?

MARU: Estoy con el hermano de Martín en el helipuerto y las noticias no son buenas, encontraron los restos y no hay sobrevivientes, Dani. Estoy tratando de localizar a Bau, pero tiene su celular apagado. ¿Crees que puedas decirle a tu marido?

DANI: Si, yo le digo, no te preocupes...

MARU: Gracias, Muni y perdón... Voy a seguir tratando de contactar a Bau, si saben de él, díganle que me llame... (Cuelga)

ALEX: ¿Decir qué a quién, amor?

DANI: Era mi prima, amor, esta con el hermano de Martín en el helipuerto y les informaron de que ya se encontraron los restos del helicóptero, nadie se salvó...

TAMI: (Había salido un momento y lo escuchó todo) No, esto no puede ser, no... (Salió corriendo fuera de la casa, llorando y desesperada)

ALEX: (Fue tras ella) ¡¡Tami, espera!! (La alcanzó apenas salió a la calle y la abrazó) Trata de componerte, por la beba, mi vida, por favor... (Tata se rendía y se dejaba caer, hasta que los dos se quedaron en el suelo, Alex abrazándola y llorando junto a ella) Ya, mi Tatita, por favor... (La mecía como cuando era niña)

TAMI: ¿Por qué me dejó? ¿Por qué ahora? (Lanzó un grito desgarrador al cielo) ¿Por qué te lo llevaste? ¿Por qué a él?

ALEX: (La abrazaba más fuerte) Él no lo eligió, Tami, no se lo reproches y se que hizo todo lo que pudo por salvarse, pero este destino de mierda no lo dejó, hermosa... (Llegaron Carmen y Eduardo y el padre de Tata la tomó de los brazos y la aferró con mucha fuerza)

EDUARDO: Ay, hijita, daría lo que fuera porque esto no te pasara...

CARMEN: (Ayudando a Alex a ponerse de pie) Ven, bebé, subamos...

TAMI: ¿Por qué se lo llevo, papá? Ahora que íbamos a ser padres, ahora que se había cumplido su sueño...

CARMEN: (Al oído de su hijo) ¿Tu hermana está embarazada?

ALEX: Si...

EDUARDO: Piensa en mi nieto, hijita y en ese bebé vas a encontrar la fuerza que te haga falta...

ALEX: (Mientras sus padres y hermana suben, él se queda un momento tomando aire) Esto no puede estar pasando... (Se sentó en la calle, contra la puerta de la casa de su hermana)