jueves, 18 de julio de 2013

Capítulo 288

Alberto tocó la puerta y cuando entró, vio a su hija abrazada fuertemente de su yerno. Se quedó un momento allí parado, en silencio.

DANI: Entonces, ¿todo bien?
ALEX: Si, preciosa, todo bien...
ALBERTO: Perdón que interrumpa
DANI: Hola, papi...
ALBERTO: Hola, princesa, ¿cómo te sientes? Hola, Alex... (Va hasta la cama y besa a su hija en la frente)
ALEX: Siéntese, suegro. Los dejo un momento, voy a llamar a mi hermana para que vaya por los enanos
ALBERTO: Gracias, Alejandro... (Alex se va) ¿Cómo estás, princesa?
DANI: Bien, pa, los tres estamos bien...
ALBERTO: Tu hermano me contó algo, ¿me explicas qué fue lo que pasó?
DANI: (Le cuenta todo, incluyendo la cantidad que Laura le había solicitado, cosa que su esposo ignoraba) No quiero que le cuentes a Alex...
ALBERTO: Hija, ¿no fue suficiente lo que te pasó? ¿Por qué no le dices todo a tu marido, mi amor? ¿No lo viste cómo está? Daniela, piensa en lo barato que sacaste esto y en cómo te sentirías tú en su lugar. No juegues a la súper mujer y no olvides que tu fuerza no está en tu soledad, sino en la unión de tu familia. Familia que formaste junto a un buen hombre que te adora. Reflexiona, por favor
DANI: No juego a nada, si la situación fuera al revés, a Alex no le dirían nada y ni se te ocurra negármelo, porque se que es así, y no quiero contárselo porque no quiero que sea él el que pague...
ALBERTO: Esto no se trata de dinero, Daniela, se trata de lealtades y el fin, no siempre justifica los medios. Para ti es fácil, porque la libraste, pero, ¿y si no? ¿Y si esa mujer lograba su cometido? Mira, princesa, no quiero pelear o alterarte, solamente trato que entiendas. Si quieres proteger, cuidar a los tuyos, hazlo, pero hazlo bien y a Alex, le diríamos exactamente lo mismo y de hecho, creo que todos estaríamos muy enojados con él, mucho más que contigo
DANI: Con él, ¿por qué?
ALBERTO: Porque es parte de una familia y si algo le pasa, deja solos a una mujer, dos niños y otro par en camino. Dani, tú no sólo llevas la responsabilidad de tu vida, sino la de los melli y de dos pequeños, para quienes eres su mundo. ¿Qué hacía Jana si debía quedarse sin ti? O Gabriel, ¿cómo crees que viviría ese niño que te ama con locura? No, mi cielo, lo que hiciste, estuvo mal.
DANI: Vale, papá, lo hice mal, ¿tú qué hubieras hecho?
ALBERTO: Una vez, cuando tú estabas pequeña y Junior recién había nacido, unos tipos me asaltaron. Me robaron el coche que era de tu abuelo, no se si lo recuerdas, el negro, de los años 50.
DANI: Si...
ALBERTO: Pues, yo amaba ese carro. La cosa es que averigüé dónde lo tenían y salí como alma que lleva el diablo a recuperarlo. Entré al depósito ese a los gritos, exigiendo que me lo devolvieran y me agarraron a tiros, Dani, me salvé porque tu padrino fue detrás mío, con la policía
DANI: Actuaste como yo, ¿o no? Ya le conté a Alejandro todo lo que tenía que contarle, sólo le oculté la suma que me pide Laura, quiero pagarlo yo...
ALBERTO: ¿No lo entiendes? A ti, se supone que te salvó Diego. A mí, me salvó tu padrino, pero sin tu tío Quique, Jadel no estaría en este mundo. Quizás la vida les hubiera cambiado tanto que ni Jana, Alejandro o Gabriel, serían parte de tu vida. Lo que te quiero decir, hija, no es que dejes que pague tu esposo, sino que pienses. (Sonríe) ¿Sabes qué me dijo tu madre cuando le conté todo?
DANI: ¿Qué te dijo?
ALBERTO: Bueno, primero, me dio una cachetada y luego, se sentó en su sillón adorado. Me miró y, ¡Dios! Te juro que me puso la piel de gallina. Su voz sonó tan dura y sus palabras fueron tan crudas, hija, que me lo acuerdo textual. Me dijo: "La próxima vez que salgas por esa puerta, Alberto, piensa en cada paso que das y has lo que esperas que yo haga para que al volver, me encuentres en casa. Piensa en lo que quieres que hagan los niños, para que siempre los encuentres aquí, jugando, aguardando por ti. Tienes dos hijos, se responsable por ellos, carajo"... Se levantó, me dio un beso y se fue a la cama. Cuando entré al cuarto, tú dormías con Junior bien pegadito a ti y tu mamá los acunaba a los dos en brazos, susurrando despacito, una canción de cuna. No lo voy a olvidar jamás, Daniela. Sabía lo que era ser padre, pero creo que ese día, entendí lo que significaba ser "papá".
DANI: Lo siento, sólo quiero que esto acabe de una vez...
ALBERTO: Lo se, mi amor, todos lo sabemos y sobre todo tu marido. Los dos buscan lo mismo y eso es vivir en paz, junto a sus hijos. Dani, eres un mujerón, mi vida, tienes una valentía y unos ovarios, que hasta hombres quisieran tener, pero lo mejor que tienes, es ese corazón noble, generoso y la fortuna de haber encontrado a un compañero, para quien eres su par. Alex te adora, te venera, igual que tú a él, aprovecha eso. Vayan juntos, de la mano, uno al lado del otro y verás que de ese modo, más tarde o más temprano, todo se va a solucionar. Háblale de lo del pago, explícale que quieres ser tú, que tienes la necesidad de asumir eso por tus medios y confía en que él te va a respetar y a comprender. ¿No lo ha hecho siempre? (Dani asiente) ¿Y entonces? ¿Qué te hace creer que esta vez no será así?
DANI: Porque es su ex mujer y piensa que él es el que se tiene que encargar
ALBERTO: Y tú piensas de otro modo, ¿acaso es la primera vez que disienten? ¿Tu marido es un tipo autoritario? No, al contrario. Mi vida, dile lo que sientes, ten confianza en lo que él cree de ti
DANI: Tienes mucha razón, pa, gracias por hacerme entender
ALBERTO: Ey, los sapes de tu mamá, me acomodaron los sesos, princesa, jajajaja
DANI: (Sonríe) Todo gracias a mamá (Se queda pensativa) La extraño...
ALBERTO: Y yo, cada día, amor. Con Nana hablamos mucho de ella y de tu padrino, que en paz descanse también.
DANI: Hablando de Nana, ¿cómo van?
ALBERTO: Muy bien, desde que Jadel bajó sus humos, las cosas están perfectas
ALEX: (Entrando) Perdón, amor, pero hay dos enanitos que quieren verte...
DANI: (Sonríe) Hazlos pasar...
GABO: (La mira, serio) ¿De verdad estás bien?
JANA: (Igual que su hermano) ¿Te tienes que hacer operar como papi?
DANI: Todo está bien, se los prometo, no va a haber ninguna operación, pero, ¿no me van a abrazar?
NIÑOS: ¡¡Siiii!! (Se le tiran encima)
ALEX: ¡¡Cuidado, salvajes!!
GABO: Perdón, pero teníamos miedo
JANA: Si, disculpa, mami
DANI: No pasa nada, los entiendo... (Los abraza y los besa)
ALBERTO: Bueno, los dejo para que estén en familia un rato. Los espero para llevarlos a casa, pequeños
JANA: ¿No nos podemos quedar a dormir?
GABO: Si, por fis
ALEX: Es un hospital, enanos, no se puede, pero mañana, bien tempranito, vienen a desayunar con mami
GABO: ¿Hasta cuándo te quedas aquí?
DANI: Hasta dentro de unas horas, el doctor me dijo que hoy mismo puedo regresar a la casa...
ALEX: Lo siento, amor, pero me dijo que tienes que quedarte en observación.
ALBERTO: ¿Por qué el cambio, Alex?
ALEX: Nada grave, suegro, pero como Dani tiene una contusión fuerte y estuvo desmayada, la quieren monitorear. Me lo dijo hace un momento, cuando esperaba a este par de revoltosos
DANI: ¿Me tengo que quedar toda la noche? No aguanto un minuto más en esta cama...
ALEX: (Se acerca y le da un besote) Déjame hablar con el médico, a ver si por lo menos, te permite ir a la cafetería y así merendamos con los niños. Al fin que no estás con suero, ni nada y seguro tienes hambre, princesa, ¿no?
DANI: Exacto...
ALEX: Lo busco y le pregunto. Te amo, Cosita (Otro beso y mira a sus hijos) A ustedes también, salvajitos... (Mira a su suegro) No me haga decirlo, Don Alberto, jajajaja (Palmea al hombre y sale)
DANI: ¿Cómo fueron las clases?
GABO: ¡Mega bien, mami!
JANA: Hoy nos dieron todas las calificaciones y papi y tú tienen que ir a la escuela
GABO: Siiii, ¡para que Jani y yo ya no vayamos hasta el año que entra! (Chocan las manos con la pequeña)
ALBERTO: Ese mundialito les dio unas semanas más de vacaciones, enanos
GABO: Si, abu, ¡es lo mejor! Porque vamos los seis, aunque me gustaría que viniera Ari, pero el tío Jadel anda de gapatarra
JANA: Eso es porque viven juntos, Gabo
ALBERTO: ¿Cómo que viven juntos?
GABO: Si, abuelo, desde hace días...
ALBERTO: Siempre soy el último en enterarme
GABO: (Le susurra a Jana) Creo que metimos la pata...
ALEX: (Vuelve con una silla de ruedas) Señora de Zavala, ¿está lista para dar un paseo?
DANI: Por supuesto (Sonríe) Y papá, no eres el último, lo sabemos nosotros porque Ari vivía en casa, no lo sabe nadie más...
ALBERTO: Seguramente no me dijo porque sigue molesto conmigo
ALEX: (Ayuda a Dani a sentarse) Dele tiempo, suegro, Jadel estuvo a la deriva y apenas se está reacomodando, ¿si? Tenga paciencia
GABO: Mami, ¿qué quieres merendar?
JANA: ¡Panquecas!
DANI: Vamos a ver qué hay en la cafetería...
ALEX: (La va llevando) Si quieres algo que no haya, te lo voy a comprar, preciosa, tú pide lo que quieras comer, que tu maridito te lo consigue...
GABO: Mi papá es un genio, ¿no, abu?
ALBERTO: Es muy consentidor...
DANI: Me saqué la lotería...
ALEX: Jajajaja, ¡cuántos halagos!
JANA: Es que eres como un príncipe, papito
GABO: Un súper héroe...
ALEX: No exageren, pero gracias por los apapachos...

6 comentarios:

  1. Que bueno que alex no se fue del hospital y pudieron hablar con dani bien muy buen capitulo me encantooo!!! :D

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  2. Que bella familia!!! Excelente capitulo!!!!

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  3. Excelente capítulo gracias por subir los capítulo eres jenial y una súper escritora

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  4. Awwww que bonita Familia los Zavala- Villalta... que bueno que el papa de Dani la hizo entrar en Razón a Dani para que le contara todo a Alex... hermosa charla entre Dani y Su padre...

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  5. QUE PASO CON EL CAPITULO DE VIERNES? :0((((

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