miércoles, 23 de enero de 2013

Capítulo 048


Martín se había pasado años sintiéndose como un cobarde por no haber luchado en su momento y por dejar que sus miedos le ganaran al amor que sentía por Tamara. Era su cruz y que ella se lo reprochara, le había dolido demasiado. Dejó a Tami en la cocina y se fue a la alcoba a cambiarse.

TAMI: (Entrando a la recámara detrás de él) ¿Qué haces?
MARTÍN: Ponerme ropa... (Se le cayeron un par de lágrimas, pero se las enjugó rápido)
TAMI: ¿A dónde vas? (se acerca por detrás y lo abraza) No te vayas, perdóname, sólo pensaba en cómo me había sentido yo y no me puse en tu lugar
MARTÍN: (Se gira y la abraza) Está bien, déjalo así. Lo importante tiene que ser esto, amor, que estemos juntos hoy y toda la vida
TAMI: Perdóname por todo lo que te dije, no quiero estar así contigo, ¿dónde está el Tincho payaso? Lo necesito, te necesito, Tincho...
MARTÍN: (Sonríe) El Tincho payaso, el Tincho insoportable y todos los Tinchos que existan dentro de mí, viven para ti, amor.
TAMI: Me alegra (lo besa apasionadamente) Vamos a beber agua, muero de sed...
MARTÍN: (Van a la cocina, Tami bebe un poco y Martín la sube a la mesada) Ahora comamos, muero de hambre...
TAMI: Siempre mueres de hambre... (Lo besa, mientras le acaricia el torso desnudo)
MARTÍN: Es que no tengo suficiente de ti, Mocosa... (Va bajando y llega a la zona sensible de Tami)
TAMI: Terreno peligroso...
MARTÍN: Eso será para ti, para mí, es el paraíso...
TAMI: Ahí es a donde me haces llegar...
MARTÍN: Y no has visto nada... (Besa profundamente)
TAMI: (Conteniéndose) ¿Ah, no?
MARTÍN: No... (Se enfoca en darle placer)
TAMI: ¿Eres experto en esto, insoportable?
MARTÍN: (Sube y la besa) Si me dejas trabajar, tú me lo dirás... (Vuelve a bajar y por fin, empieza)
TAMI: ¡Oh, Dios mío, eres el maestro de esto! (Estaba disfrutando más que nunca, deliraba de placer)
MARTÍN: (Se detiene y la mira) ¿Le sigo o...?
TAMI: No preguntes y sigue....
MARTÍN: (Continúa hasta que la lleva al cielo y acto seguido, la carga y la lleva al sillón) Quiero hacerte mía aquí, ¿crees que este mueble resista?
TAMI: No estoy segura, pero no me importa (sonríe socarronamente)
MARTÍN: ¡¡Esa es mi mocosa!! (Se sienta y la hace subir en su regazo) ¡Comprobemos la resistencia de tu sillón y si lo rompemos, te compro el que quieras! (Le besa los senos)
TAMI: Vamos a romper el sillón...
MARTÍN: Tú mandas, mocosa, has de mí lo que se te antoje
TAMI: Jajajaja, ¡menso!
MARTÍN: No te rías, ¿no te enteraste que te amo y que quiero hacerte mía otra vez y para toda la vida, sin parar hasta que sea un viejito sin fuerzas?
TAMI: Me queda más que claro y me encanta (se besaban intensamente)
MARTÍN: ¿Sabes lo mucho que te amo y lo que soñé con este instante, hermosa?
TAMI: No sabes los años que espero esto... ¡¡¡Te amo!!!
MARTÍN: (Le besa el cuello muy cachondo) Si supieras las cosas que te hice en mis sueños, amor
TAMI: Enséñamelas (lo besa para tentarlo)
MARTÍN: Mmmm... Son un poco hot para hacerlas ahora, mocosa... Jajajaja...
TAMI: Jajajaja, dame todo lo que tengas pues...
MARTÍN: Si te doy todo, no vas a querer salir nunca más de aquí...
TAMI: ¿Quién te dice que quiero salir de aquí? (Mientras hablaban, ella lo tocaba por todos lados)
MARTÍN: (Estaba agitado, las manos de Tami lo provocaban demasiado) ¿No quieres?
TAMI: No... (Empezó a besarlo por todo el rostro y fue bajando hasta su cuello y el lóbulo de su oreja)

Tincho la cogió de la cintura y la hizo moverse un poco, entrando en ella nuevamente. Sostuvo la penetración y luego, siguió deslizándose en Tamara. Por momentos era suave y en otros, un poco más salvaje, pero siempre placentero. Martín era un amante gentil, apasionado y muy consentidor, así que cada vez que notaba que lo que hacía era del agrado de su mocosa, lo repetía para hacerla vibrar entre sus brazos.
Tamara nunca había sentido con el Toro lo que estaba sintiendo con Tincho, estaba disfrutando cada movimiento, cada caricia y a cada embestida, Martín la abrigaba entre sus brazos, ayudándola a confiar, a relajarse, a entregarse como él se entregaba. Estos no eran unos besos cualquiera, eran los besos que los dos llevaban años guardándose. Tampoco eran dos cuerpos cualquiera, en lo absoluto, estos eran dos cuerpos que se habían añorado desde que comenzaran a entender lo que su piel les pedía y no era un amor común, del montón, este era un amor que supo esperar pacientemente, la hora de salir a la luz y ser vivido, sentido y gozado. Esa noche no era cualquier noche, era la noche que lo iba a cambiar absolutamente todo.

En el cuarto de Dani, mientras tanto, las cosas también tomaban temperatura y Alex no estaba seguro de continuar, por lo que dejó sus manos quietas y miró a Daniela, para saber qué hacer.

DANI: No quiero que te detengas...
ALEX: (Le quita la camisa) Sigo pensando que es el mejor pijama del mundo, amo como te luce... (Le besa el cuello y el lóbulo de la oreja)
DANI: No sabes los sueños que tengo con este pijama puesto,  jajajaja (lo besa y lo excita)
ALEX: Cuéntame... (Golpean la puerta y Alex se mete debajo de la cama, golpeándose un poco)
DANI: (Se acomoda la ropa) ¿Quién es?
JANA: (Entrando) ¡Mami! ¿Me llevas al baño? No anda la luz...
DANI: Claro, mi amor, vamos ¿dónde está tu tío?
JANA: Duerme como el oso del dibujito, jajajaja, no lo pude despertar...
DANI: Jajajaja, vamos al baño (le da la mano a su hija y le lleva al baño)
ALEX: (Se sobaba el codo y la rodilla) Ayyy...
DANI: (Deja a su hija en su cama y va a su cuarto) Amor, ¿estás bien? (cierra la puerta con llave)
ALEX: (Saliendo de abajo de la cama) Si, me golpeé el codo y la rodilla, pero nada grave. ¿Jana está bien?
DANI: Si, sólo quería ir al baño (se acerca a él) Déjame ver ese codo...
ALEX: No pasó nada... ¿Me quedo y la seguimos o me voy o qué, amor?
DANI: ¿Dónde vas a estar mejor que aquí? (Lo besa apasionadamente y comienza a desvestirlo)
ALEX: (Se deja desvestir) En ningún lado, pero, ¿cerraste con llave?
DANI: Ajá... (Lo desviste de cintura para arriba y sigue con los pantalones)
ALEX: (No hacía más que ver cómo Daniela lo desvestía) Mejor... (Ella roza apenas su centro por encima del pantalón y Alex se estremece) Uy, amor, lo que le haces a mis sentidos, no es normal...
DANI: Es completamente normal (lo desviste del todo y observa su cuerpo, se aleja un poco) Nunca me había parado a admirar tu belleza...
ALEX: Pues, me toca a mí, admirarme con la tuya, amor, desvístete para mí, por favor...
DANI: Prefiero que me desvistas tú...
ALEX: (Se le acerca y a medida que le desabrocha cada botón de la camisa, le va besando lo que queda al descubierto) Eres tan hermosa, Dani, no me alcanzan los ojos para apreciarte... (Le quita la camisa, dejándola caer al piso y le besa el cuello con suavidad. Se detiene y le susurra al oído) ♪♪Hoy, hermosa de mis sueños, llegas a llenar mi vida...♪♪
DANI: Hazme el amor...
ALEX: (La recuesta en la cama sin dejar de besarla y de acariciarla) Algo en ti me llena de fuego y por más que hagamos el amor mil veces, no se apaga... (Entra en ella con mucho cuidado y paciencia, de modo de no hacer alboroto)
DANI: El fuego nunca se apaga, amor (se besan intensamente, saboreándose los dos)
ALEX: (Con cada penetración, las manos se agarraban con fuerza, ayudándose mutuamente a contener los gemidos) Se siente maravilloso estar dentro de ti
DANI: Lo que se siente maravilloso es tenerte aquí, en mi cama (seguían las penetraciones al compás, disfrutaban el uno del otro, amándose despacio, sin prisas)
ALEX: Hacerte el amor, será maravilloso dónde sea y cómo sea... (Sale de ella y se acuesta boca arriba, esperándola) ¿Vienes, hermosa?

Dani sonríe y se recuesta sobre él, tomando ella el control de la situación. Alejandro la miraba y seguía sin creerse su suerte, la amaba tanto...

ALEX: (Ella comenzó a moverse y él la tomó de la cintura) Algún día, lo haremos en nuestra cama, sin tener que escondernos, amor...
DANI: Espero que no tarde ese día... (Lo besa e intensifica los movimientos)
ALEX: (Se empieza a enloquecer y a agitarse) Si, amor, sigue haciendo eso...

Daniela lo besa para sofocar los gemidos y sigue aumentando la intensidad de los movimientos hasta que se da cuenta que su novio está a punto de perder su poca cordura restante. Alex se abraza a Dani y ella eleva la apuesta un poco más, disminuyendo el vaivén, convirtiéndolo en una deliciosa tortura...

ALEX: ¿Qué haces, Cosita? No pares, por favor, me vas a volver más loco aún...
DANI: Eso pretendo, amor... (Aumentó y disminuyó continuamente)
ALEX: Dani, no me busques... A menos que me quieras encontrar...
DANI: Quiero encontrarte...
ALEX: Lo lograste, Daniela y ahora no te salva nadie... (La hace levantarse y la lleva al privado del cuarto de Dani, cierra la puerta) Desde aquí no nos van a oír. (Coge todas las toallas que encuentra y las tira al piso y hace que ella se acueste y luego, se acuesta él) Me desbocaste, atente a las consecuencias, amor...
DANI: Castígame, jajajaja
ALEX: (La toma de las pompas, las aprieta y la penetra con cierta rudeza, consiguiendo que Dani gima abiertamente) Te lo dije, Cosita...
DANI: ¡Oh, sigue!...
ALEX: No lo se, convénceme...
DANI: Te lo ruego...
ALEX: ¿Quieres más carnita Zavala, amor? (Le sonríe y retoma su labor) ¡Por Dios, cómo te amo y cómo me fascinas, Dani!
DANI: Tú me fascinas a mí, bésame como nunca me has besado, necesito sentir tus labios, sentirte a ti…

Alejandro la besa como si el mundo fuera acabarse y así, entre besos, caricias y gemidos, llegan al ansiado orgasmo, juntos. Después de eso, se quedaron sentados sobre las toallas, hablando y un poco más tarde, se acostaron...

Jana despertó sola, miró a su lado y el tío Jadel seguía dormidísimo. Le dio un besito y se puso sus pantuflas de haditas. Fue al baño y después a buscar a su mamá. No sabía qué hora era, pero quería ver a Dani. Golpeó la puerta del cuarto y quiso entrar, cosa que no pudo hacer, porque estaba cerrada con llave.

JANA: ¡¡MAMIII!! Tengo hambre, ¿me abres?


9 comentarios:

  1. Dani: Castigame
    Alex: quieres mas carnita zabala amor!
    jajajajaja son unicos...

    ResponderEliminar
  2. Cuánta cachondez! Jajajaja!! Somos únicos!!

    ResponderEliminar
  3. QUIERO MÁSSSSSSSSSSSSSSSSS!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    ResponderEliminar
  4. O sea q Alex existe? Xq comenta el cap. Y Daniela es real? Jeejejej es q recien veo su blog

    ResponderEliminar
  5. Sí, Naty, Alex y Dani existen, son mi hermano y mi cuñado y esta es su historia, un poco modificada...Me alegra que leas mi historia!!..Besos!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí... Yo estoy enganchada! Cada cuanto subes los cap? Recien me sumo a leerlos en tu blog!

      Eliminar
    2. Subo uno al día, de lunes a Viernes...

      Eliminar
  6. Tamara,
    Gracias por escribir esta linda histora :-)
    Cada capitulo q subes es muy emocionante.

    ResponderEliminar