Capítulo 040

Bautista Zavala, era primo de Alejandro y Tami. Tenía dos años menos que Alex y los tres se adoraban. El joven músico era un hombre ir y venir y llevaba más de seis meses viviendo la vida loca en México. Independientemente de sus aventuras, Bauti o el “Titán”, como lo llamaban sus primos, no duraba más que unos meses en sus viajes porque añoraba su tierra, su familia y volvía cada vez más rápido de sus excursiones.

BAUTISTA: Hola, primate…

ALEX: (Sonriendo) ¿Titán?

BAUTISTA: El mismo que viste y calza, ¿cómo andas, condenado?

ALEX: (Mira a Dani) Más feliz que nunca, primo insensible y puerco. ¿Tú?

BAUTISTA: Ando a las mil maravillas, con los pies, jajajaja

ALEX: Pues, en referencia a tu persona, eso es novedoso... ¿Ya vuelves, mendigo?

BAUTISTA: Si, en un par de días estoy de vuelta en mi tierra hermosa...

ALEX: ¡Me alegro, desgraciado! Y a ver si ya dejas el jaleo de tanto viaje y te quedas con nosotros. Nomás te aviso que tanto Tamara, como mi hijo, andan indignados contigo

BAUTISTA: ¿Y eso? ¡Qué malos primos son! Yo no les hice nada...

ALEX: ¡A Gabriel si, oye! Le prometiste enseñarle a tocar el piano y no lo hiciste. No me deja que yo le enseñe y enchincha con que seas tú y a tu prima algo le prometiste y no se lo has cumplido.

BAUTISTA: Cierto, mi prima y yo tenemos algo entre manos, no me acordaba y en lo referente a tu hijo, él si sabe quién es el mejor al piano, jajajaja...

ALEX: Nadie discute que el músico de la familia eres tú, pero Gabo anda ofendido. Por cierto, mis papás y Ari vienen pronto y se quedan, así que si tus padres se dignan a pelarnos, vamos a estar reunidos todos, otra vez. Los convences, por favor, Titán...

BAUTISTA: ¿Todavía siguen enojados con mis tíos? ¡No puede ser! Mi papá es de lo que no hay, son dos viejos tercos, yo me encargo de que nos reunamos y así intentamos arreglar las cosas...

ALEX: Nosotros no estamos enojados, no se si mi papá lo esté con el tuyo, pero cosa de ellos, hermanos son hermanos, jajajaja... (Dani se mueve como para dormirse y Alex le pellizca las pompas) Oye, demonio viajero, tengo que colgar, pero avisa cuándo llegas así voy por ti al aeropuerto.

BAUTISTA: Yo te aviso, primate, sigue con tus cosas que seguro están muy interesantes, jajajaja... Hasta pronto, ¡¡te quiero, primo!!

ALEX: ¡No seas menso, caray! ¿Cómo que "interesantes"? No pienses lo que no es, pero déjame decirte que NO TIENES IDEA, jajajaja... Eres una mariposa, pero yo también te quiero, Titán. Me alegro que ya vuelvas, primo, no es lo mismo sin ti. ¡Por cierto! Otro que regresó fue Tincho y contigo y Andrés, ¡EL CUARTETO MAGNÍFICO VUELVE!

BAUTISTA: Ahora si quiero regresar, vamos a darle duro a las mamirruquis de la tierra, jajajaja

ALEX: Le darán duro Tincho y tú, porque lo que somos Andrés y un servidor, ya estamos fuera de órbita...

BAUTISTA: No me la creo, ¿ya te cazaron? Quiero conocer a esa mujer, es mi ídola, jajajaja... Y de lo de Andy, me estás echando jaleo, ¿no?

ALEX: Es cierto, Andrés está completamente enamorado y cambiado. Es otro hombre, el amor hace esas cosas y por lo otro, tiempo al tiempo, Bautista pero si fuera por mí, a esa palabrita que usaste, le quito la "z" y la reemplazo por una "s"... (Vuelve a pellizcar a Dani que parecía dormida)

BAUTISTA: Tú no cambias, jajajaja, pero lo de Andy, lo tengo que ver, ¿le dieron caza al cazador? ¡¡Jajajaja!! Bueno, primate, ya te dejo. En unos días nos vemos, besos y salúdame a mi primita y al diablo de tu hijo, cuídate (cuelga)

ALEX: (Deja el teléfono a un lado) Amor... ¿Te dormiste?

DANI: No, contigo cómo dormirse...

ALEX: Ahhh... Pensé que si, mírate cómo te acomodaste, hermosa...

DANI: Estaba descansando un poco en lo que hablabas con ¿tu primo?

ALEX: Mi primo, si, pero crecimos como hermanos. (Se recuesta bien junto a su novia y la abraza) Sólo que es medio vagabundo, jajajaja, le gusta ir de aquí para allá. Es el único hijo de mi tío Adolfo, el hermano menor de mi papá.

DANI: ¿Por qué lo llaman "Titán"?

ALEX: Yo lo llamo así. Mi mamá dice que cuando él nació, me costaba decirle Bautista y le decía "Tita" y mi tío rezongaba con que eso era apodo de mujer. Entonces papá me dijo que le diga Titán y así quedó. Eso no es nada, él me dice "primate"

DANI: ¿Primate? (Lo mira de arriba a abajo) Un poco, sí, fíjate, jajajaja...

ALEX: ¿Ah, si? Con que soy primate, señorita... ¿Me amas primate?

DANI: Te amo como sea (Lo besa) Primate (lo vuelve a besar) o no (besote) ¡¡Te amo!!

ALEX: Si me amas, Cosita, ¡HAZME COSITAS! (La mira y levanta las cejas, sonriendo)

DANI: ¡¡ Jajajaja!! Hagamos cositas, amor (Se le sube encima sin que Ale entre en ella y lo besa apasionadamente)

ALEX: Tú mandas, te amo...

El fin de semana pasó con mucha tranquilidad para todos, pero para Tami, cada segundo sin decir lo que debía decir, era como una tortura. Ya era la noche del domingo y ella estaba en su casa, a punto de cenar con el Toro, juntando valor para confesar que aunque lo amaba, había llegado otro hombre a revolucionarle la vida. Martín no era algo sin importancia, eso no se podía negar y la muchacha necesitaba aclarar sus sentimientos: no debía seguir con Sergio cuando en su cabeza la imagen de Tincho le quitaba el sueño y en sus labios, los besos de aquel hombre, aun la quemaban.

TAMI: (Estaban sentados a las mesa cuando se decidió) Amor, tenemos que hablar...

TORO: (La miró) Lo se, ya me lo habías dicho. ¿Ya te vas a animar a contarme? Me tienes los pelos de punta, Tamara, ¿qué pasa?

TAMI: No se cómo decírtelo, no se cómo te lo vayas a tomar...

TORO: Me asustas, mi amor. Di lo que sea, pero de una vez, por favor.

TAMI: (Respira hondo) Primero te quiero decir que te amo y que pase lo que pase, siempre te voy a amar...

TORO: Tami, habla ya, deja las vueltas que me pones nervioso.

TAMI: No puedo engañarte, no te lo mereces. Llegó alguien del pasado a mi vida y mis

sentimientos se vieron afectados por ese regreso. Por eso te voy a pedir que nos demos un tiempo, necesito poner orden lo que siento y si estoy contigo, no voy a poder...

TORO: (Se quedó mirándola, incrédulo) ¿De qué hablas? ¿Quién llegó?

TAMI: (Le agarra la mano) De que estoy confundida, amor, no sé lo que siento por cada uno, no se a quién amo más (Sabía que le estaba haciendo daño y eso era lo que le dolía) Por eso no quiero engañarte, quiero que lo sepas de mi boca, porque antes de que pase algo que rompa definitivamente esta pareja, quería que supieras lo que siento, lo que me pasa...

TORO: (Seguía sin creer lo que escuchaba, no podía estar sucediendo eso, no a ellos) ¿A quién amas más, Tamara? ¿O sea que a este otro tipo lo amas? ¿Desde cuándo está en tu vida y de dónde regresó? Porque llevamos seis años juntos y nunca supe que hubiera un viejo amor, pensé que yo había sido el primero y el único en tu vida.

TAMI: No se lo que siento por Tincho, por eso es que te pido tiempo, para aclarar mis sentimientos, para estar segura de lo que siento, no quiero hacerte daño, pero si no te lo digo te haría aún más daño y no quiero eso...

TORO: ¿Hacerme daño? Me matas con esto, niña, ¿no te das cuenta? Y responde lo que te pregunté, ¿desde cuándo está el tal Tincho?

TAMI: Llegó hace unos días de Barcelona, es uno de los mejores amigos de Alex, desde que eran pequeños. Se fue cuando yo tenía ocho años, luego regresó cuando cumplí los quince, pero nunca tuve nada con él, lo amaba en secreto porque pensé que nunca me iba ni a mirar por ser más pequeña. Sin embargo, el otro día me confesó que sólo me había podido amar a mí y el pasado regresó para cambiarme la vida. No sé si sea para bien o para mal, pero vino a cambiármela...

TORO: (Se pone de pie y coge sus cosas) Pues haz lo que tengas que hacer, Tamara y yo haré lo mismo. Lo nuestro se termina aquí y ahora, no puedo estar contigo si amas a otro tipo

TAMI: No, amor, espera, no te vayas así (las lágrimas empezaban a correr por sus mejillas) Después de lo que pasó con Tincho, me prometí que no me iba a enamorar de alguien mayor que yo, pero llegaste tú y todo cambió, mis ilusiones y mis ganas de amar llegaron en tropel, sólo dame tiempo por favor...

TORO: No me pidas que te de tiempo para que tengas una historia con él y te saques las ganas que le traes, Tamara. ¿Quieres aclararte, saber lo que sientes, decidirte por uno? Te hago la vida fácil, ¡quédate con Tincho y a mí déjame en paz! Sólo te voy a pedir que dejes a Gabo fuera de esto, amo a ese enano y no quiero perderlo a él también

TAMI: (Se levantó y lo miró a los ojos) ¿Eso es lo que me amas? ¿Ni siquiera vas a luchar por mí, ni siquiera vas a intentar convencerme de que te amo a ti? Ahora se todo el amor que me tienes y no te preocupes por Gabriel, él va a seguir siendo tu sobrino aunque esto se acabe,  no lo pienso meter en esto...

TORO: No me voltees la tortilla, Tamara, A MÍ, ¡NO! No me estés cuestionando lo que te amo, porque lo sabes, pero no voy a rogarte amor ni a pelear por algo que tendrías que darme porque te nace desde el alma. Seis años juntos, no seis días y una vida proyectada contigo que se me va a la mierda en dos segundos porque andas caliente con un tipo que no ves desde hace diez años y que vino a calentarte la oreja. No soy yo quien no sabe lo que siente, eres tú, así que deja de hacerte la mártir, la pobre niña que no entiende sus sentimientos. Ve, acuéstate con él, haz lo que se te antoje, pero no quieras culparme a mí porque esto se haya terminado. Yo hablaré con tu hermano por el niño, no te preocupes. (Llega a la puerta y se detiene) Ojala y si lo ames y él te ame a ti, al menos que valga la pena esto que acabas de hacernos. (Se va dando un portazo)

TAMI: (Sale tras él y lo detiene) ¿Te piensas que es sólo una calentura? Crees que sólo le tengo ganas? Si fuera así, me habría acostado con él, pero no, te vine a decir lo que me pasa y tú me tratas como si fuera, qué, ¿una cualquiera? De haber sido una calentura, te hubiera hecho lo que me hiciste tú, pero no, te vine a dar la cara y decirte lo que me pasa. Lo que tienes tú es el ego herido, ¿cómo un hombre va a venir a quitarte lo que es tuyo? Y, ¡claro! La culpa es de la furcia de tu novia, que quiere meterse a la cama de otro. ¡Gracias por abrirme los ojos! Y para tu información, no iba a empezar una relación con Tincho, porque igual que te pido tiempo a ti, se lo pedí a él, quiero estar sola para aclararme, pero él, a diferencia tuya, intenta convencerme de que lo escoja a él y no se da por vencido...

TORO: ¡Ya estás hecha, Tamara! ¡Escógelo a él y se feliz! ¿Qué quieres que haga, eh? ¿Qué te esté rogando como un imbécil que no me dejes, que no me pidas tiempo? ¿Qué te convenza que soy el amor de tu vida? ¡¡PENSÉ QUE LO SABÍAS!! Y ya deja de estar sacándome en cara el error que cometí hace años, porque me tienes harto. Se suponía que era tema terminado, pero por lo que veo, lo único que se ha terminado aquí, es lo nuestro. Vete con el que no se da por vencido y a mí, ni me recuerdes.

TAMI: Está bien, lárgate, vete y métete en la cama de la zorra. No lo voy a escoger a él si no lo amo, pero que te quede bien claro, cuando quieras volver, será demasiado tarde. Si no lo amo a Martín,  no voy a intentar volver contigo, prefiero quedarme sola, que con un tipo como tú, que no lucha por lo que quiere, ni hace el mínimo esfuerzo por luchar. Es más fácil empujarme a los brazos de otro hombre que pelear... (Se seca las lágrimas) Adiós, Sergio, que te vaya bien (Se da media vuelta y se encamina a la casa) No se cómo pensé que me quería o que iba a luchar por mí, soy una ilusa...

TORO: (La detiene) ¡En esa misma cama me voy a meter, Tamara! Así me aseguro de darte el gusto y darte motivos para excusarte y sentirte una pobre víctima... Y soy tan imbécil que estaba convencido que me ibas a decir que estabas embarazada y es tan poco lo que te amo que te había comprado esto (Le da un paquetito que dentro tenía un chupón) Yo creyendo que me dirías que íbamos a ser papás y mira lo que obtuve a cambio. ¡No quiero volver a verte en mi vida y tranquila, no pienso buscarte ni aunque me muera por ti! ¡Adiós, Tamara, hasta nunca!

TAMI: ¡Hasta nunca! (Sergio se fue y ella miraba el chupón con lágrimas en los ojos) Se acabó todo, lo siento Tincho, no voy a poder estar contigo ni con nadie (Entró en la casa y se encerró en su cuarto, quería pasar el dolor sola)