Capítulo 057

Alejandro estaba molesto y Daniela quería arreglar las cosas, así que ahí estaban los dos, frente a frente.

DANI: Te pido perdón por los celos, es el miedo a perderte lo que me pone así... (Caminaba de un lado a otro, sin dejar de mirarlo) Yo no era así y confío en ti, pero que se te acerque una tipa, me mata, ¿quién me asegura que no vas a encontrar una mejor que yo?

ALEX: (La mira y se apoya en el auto) Ven acá, Dani (Le abre los brazos y ella se aferra a él) Para mí tampoco es fácil, amarte así me llena de sensaciones que nunca he tenido y los celos son parte de eso, también me cuesta manejarlos, pero lo intento y quiero confiar en que los dos vamos a luchar juntos por nuestro amor. Yo no te voy a dejar, no me vas a perder y otra como tú o mejor, no existe, no para mí. Daniela, te amo como jamás he amado en mi vida, ¿crees que te lastimaría de esa manera? De verdad, ¿me crees capaz de semejante bajeza?

DANI: Yo no te creo capaz de engañarme, pero de dejarme porque te enamores de otra, sí. Hasta yo te lo pediría. A eso le temo, tengo miedo a que me dejes de amar...

ALEX: No hay ni va a haber otra y si eso sucediera, pues estaría fuera de nuestro control, amor, pero no dejes que tus miedos te dominen, porque todo se vuelve una locura. Imagina que yo hago lo mismo, entonces nuestra relación se va a ir al demonio y yo me muero sin ti, Dani, no quiero vivir una vida que no comparta a tu lado, ¿comprendes eso? ¿Lo puedes entender? Estoy proyectando mi vida basándome en lo que sentimos, así te amo y así quiero pasar cada día de mi existencia, sólo contigo...

DANI: Y yo contigo... Perdóname

ALEX: (Se ríe pasivamente) Dame un beso y todo queda olvidado...

DANI: No quiero olvidarlo, quiero solucionarlo

ALEX: La solución viene con el tiempo. Quizás cuando llevemos diez o quince años de casados y tengamos algún que otro nieto, dejes de tener miedo...

DANI: (Sonríe) ¿Tantos años? (Lo besa)

ALEX: Ojala sean menos, amor (Otro beso) Ey, Cosita, confía en lo que sentimos, yo lo hago, ¿por qué tú no?

DANI: Porque tengo miedo, ayúdame a no tenerlo

ALEX: Cierra los ojos (Dani lo hace y Alex la besa como nunca antes la había besado) ¿Mejoras, amor?

DANI: Si, mejoró mucho (Lo besa) ¿Entramos? Nos están esperando

ALEX: Entremos, pero de la mano... ¿¿Me das otro beso de lengüita??

DANI: Jajajaja, claro, hermoso (Le da un besote y entran al restaurante)

FERNÁNDEZ: (Viéndolos entrar) ¡Por fin, muchachos!

ALMA: Desde que los vi, supe que andaban... ¿Cenamos de una vez?

ALEX: (Se sientan) Disculpen por lo de hace rato, para los dos todo es muy nuevo y esto de ocultarlo nos pone los nervios de punta.

FERNÁNDEZ: ¿Por qué lo esconden, Alejandro?

DANI: (Mira a su novio) Por mí, no quiero que llegue a oídos de mi hija ni de mi familia hasta que esté segura que esto es para siempre...

ALMA: ¿Aceptas mi consejo, Daniela? Tómalo como de quien viene, muñeca: una mujer con experiencia en la vida...

DANI: Por la experiencia es por lo que lo hago...

ALMA: Eres una mujer aguerrida, inteligente y puro corazón, Daniela, se te nota. Te entregas en alma y vida, pero tus viejas heridas, hoy, te están haciendo cometer errores. Yo no se qué fue lo que te pasó o quién ni por qué te hicieron tanto daño, pero si puedo ver, que sentado a tu lado, hay un hombre que te ama lo suficiente como para sanar tus heridas y a quien amas tanto, que le estás abriendo las puertas de tu vida, por primera vez desde que saliste lastimada. Eso es el amor, es ser vulnerables, es darle el poder a otro ser humano de sanar tu alma y si ese amor es correspondido, nunca olvides, que esa otra persona, te está dando exactamente lo mismo a ti. Si las cosas salen mal y te hieren de nuevo, bien valdrá la pena porque, cada momento triste, Dani, nos lleva a un momento feliz. Ustedes son jóvenes, se adoran, no permitan que su dolor les gane. Arriésguense, ámense y den todo lo que son al otro, porque si lo hacen, por más que a veces las cosas salgan mal, van a poder ser felices, niños...

FERNÁNDEZ: (Besa a su mujer) Esa es mi esposa, señores, la mejor de la tierra...

DANI: Estoy en ello señora, pero no es fácil. Lo único que se es que amo a este hombre, como nunca he amado a nadie...

ALEX: Y yo te amo igual a ti, hermosa...

FERNÁNDEZ: Una cosa más, para los dos, aunque tengan noventa años juntos, van a seguir teniendo celos. No son por desconfianza, ni por inseguridad, eso lo dicen los que estudian y el amor no se puede estudiar porque cada ser humano es diferente y siente las cosas de manera muy íntima, muy particular.

ALEX: Si no son inseguridades o desconfianza, ¿qué son?

FERNÁNDEZ: Es el mismo amor, Alejandro. El sentimiento nos avasalla, nos desborda y lo potencia todo. Cuando se ama, las cosas empiezan a tener una dimensión distinta y no importa si te enamoraste mil veces de mil personas, porque tú no eres el mismo. Algo en ti cambia con cada nueva experiencia y el hombre que se enamoró de una, no puede enamorarse de la otra. Quiero decir que su amor, es único, irrepetible e inigualable y los celos, son parte del paquete. Nosotros peleamos igual que ustedes. A la hora de la discusión, somos dos adolescentes caprichosos, se los aseguro.

DANI: Son un ejemplo a seguir

ALEX: Francamente, Fernández, cuando nos contactó no me imaginé que además de hacer negocios, iba a darnos semejante lección de vida. Estamos muy agradecidos y desde ya les digo, los voy a invitar a la boda...

FERNÁNDEZ: ¿Se van a casar pronto?

ALEX: Por mí, me caso mañana, pero no es tiempo aún. Sin embargo, algún día lo haremos...

DANI: Y ese día, serán invitados de honor, se los aseguro

ALMA: No puedo esperar, muñeca, ¡AMO LAS BODAS!

Los cuatro se rieron y la cena fue sumamente agradable. El matrimonio de Julio y Alma era muy divertido y una vez que se relajaron, Alex y Dani, pudieron por primera vez, comportarse como una pareja, delante de gente conocida. Esto los liberó un poco. Al final de la velada, el licenciado ofreció a la fotógrafa, llevarla a su casa. Poco después, llegaron a casa de Dani y ella se bajó del coche…

ALEX: (Se baja también) ¿Por qué no esperaste a que te abra la puerta, amor?

DANI: Para que no cogieras frío al bajarte, pero no sirvió de nada, porque igual, te bajaste del auto...

ALEX: Porque me gusta tratarte como la dama que eres y a las damas, se les abre la puerta del carro, se las acompaña hasta su puerta y se las despide con un enorme y profundo beso de amor.

DANI: Nos saltamos todo lo demás y vamos a lo del beso

ALEX: ¿Qué pasa ahora, Dani?

DANI: Nada, ¿por qué?

ALEX: Nada, déjalo así. Descansa, amor, hasta mañana...

DANI: No, déjalo no, dime...

ALEX: Casi no hablaste en todo el camino, ahora te vas así como así, no entiendo, ¿estás enojada porque dije que estamos juntos? Ellos no van a decir nada

DANI: En el camino no dije nada, porque estoy muy cansada y ahora me quería saltar todos los pasos anteriores para poderte besar antes de llegar al portal, porque de aquí al portal, es mucho trayecto sin besarte

ALEX: ¿Segura?

DANI: Segurísima, pero estás tardando mucho en besarme, amor

ALEX: (Le da un beso) Duerme bien, hermosa.

DANI: ¿A dónde vas tan rápido?

ALEX: A casa. Me dijiste que estás cansada, no quiero incomodarte

DANI: Tú no me incomodas y menos para darme esos besitos que me das (Le sonríe, se cuelga de él y lo besa) ¿Te vas a ir?

ALEX: Creo que es lo mejor, Dani...

DANI: Pues, buenas noches, (Le da un beso y se va al portal)

ALEX: (Se queda ahí parado) Quiero que hagamos el amor y se que no lo vamos a hacer, por eso te digo que no quiero incomodarte...

DANI: Está bien, buenas noches... (Entra y deja a Ale parado al lado de su coche)

ALEX: Buenas noches... (Se queda ahí, apoyado en el auto)

Daniela sube a su departamento y al llegar, mira por la ventana: Ale seguía allí. Él, saca su celular y la llama...

DANI: (Mira su celular, ya estaba en su cuarto cuando sonó el teléfono. Lo descuelga) Dime...

ALEX: Lo siento, no quise hacerte mal, pero no estaba seguro de poder controlar lo que me provocas y pensé "Si me dice que no y no puedo detenerme, va a pensar que sólo quiero eso con ella"... Dani, eres tanto para mí que me pongo un poco estúpido y trato de hacer lo que esperas que haga, ¿sabes? Quiero hacer las cosas de un modo en que tú te sientas segura de mí y ayudarte a entender que te amo de verdad, pero no me sale bien y al final, hago lo que no quería hacer, lastimarte. Me muero por besarte y quedarme contigo en el portal. Perdóname. Supuse que irme a tiempo, era una manera de respetarte y ya veo que no lo es. También necesito ayuda, No tengo todas las respuestas y no soy perfecto, pero aquí estoy, pidiéndote perdón y si no subo a decirlo mirándote a los ojos, es porque está Jana... Eso es todo, amor, te amo. Descansa...

DANI: Sube...

ALEX: ¿Segura?

DANI: Si...

ALEX: (Corta la llamada y al llegar al departamento de Dani, le manda un mensaje. Ella abre la puerta) ¿Me perdonas?

DANI: Claro, bobo (Se le cuelga y le da un beso) ¿Quieres un café?

ALEX: No, te quiero a ti, hasta donde pueda tenerte... (La besa como rato antes, fuera del restaurante) Lo siento, lo siento, lo siento y te amo más de lo que te imaginas... (Más besos)

DANI: (Mientras se besaban, sonreía) Yo también te amo, ¿pasas?

ALEX: Claro que si... (La alza y Dani le cruza las piernas por la espalda. Entra y cierra la puerta despacio, apoyándola contra ella)

DANI: Te amo

ALEX: Y yo a ti, Cosita mía (Le besa el cuello y la aferra por las pompas) Me vuelves loco, Dani...

DANI: Vamos a la cocina (Ale la lleva sin soltarla y cierran la puerta) No puedo resistirme a ti

ALEX: ¿No? (Intensifica los besos) No te resistas, amor, déjate…

DANI: (Se dejó llevar, pero al poco tiempo escuchó unos pasos) Para, amor…

ALEX: Si, princesa... (Le acomoda un poco la ropa a ella) Ve a ver, te espero aquí

DANI: (Jana entra en la cocina) Hola, mi vida, ¿qué pasó? (La alza en brazos) ¿Por qué estás despierta?

JANA: Quiero agua, mami...

DANI: (Coge agua y se la da) Toma…

JANA: Gracias, mamita... (Toma un sorbo) ¿Me puedo llevar el vaso a la cama? (La pequeña se restregaba los ojos)

DANI: Claro, mi amor

JANA: (Le habla al oído) ¿Quién es el señor?