Capítulo 320

Al escuchar el tremendo ruido, Alex se giró y salió corriendo como loco. Cuando llegó al carro, Dani estaba inconsciente y con heridas en el rostro

ALEX: ¡¡Mi amor!! (Le acariciaba la cara) Hermosa, abre los ojos... (Sacó el celular) Titán, dile a alguno de los médicos que hubo un choque frente al hospital y que hay una mujer embarazada que no responde (No dejaba de acariciar a Dani)

BAUTISTA: Ya aviso, pero, ¿qué pasó?

ALEX: Es Dani, Bautista, ¡muévelas! (Corta) Cosita, por favor, cielo, abre los ojitos...

BAUTISTA: (Salió como loco a buscar a un doctor y después de avisarle, fue en busca de su primo, llegando rápidamente hasta él) ¿Cómo está? ¿No reacciona?

ALEX: (Niega) Hermosa, ¿me escuchas? (Se le caían las lágrimas) Mi amor, no me asustes así, reacciona...

BAUTISTA: Ahí vienen los médicos, primo, no te preocupes, no va a pasar nada (Le toca el hombro)

A duras penas, los doctores pudieron hacerle entender a Alex que necesitaba ponerse a un lado y dejarlos trabajar. Como pudo, Bautista lo agarró y lo sostuvo hasta que sacaron a Dani del carro y la llevaron para atenderla. Durante ese pequeño trayecto, Alejandro no la soltaba, ni dejaba de hablarle y besarle el rostro. Al llegar a la puerta de la guardia, el médico lo detuvo y justo cuando estaban por llevársela, ella abrió los ojos.

ALEX: (Se acerca y la besa) Todo va a estar bien, mi amor. Te amo, preciosa, tú tranquila.

MÉDICO: Señor, déjenos trabajar

ALEX: (Más besos) Dani, te amo, no vayas a olvidarlo.

ENFERMERA: Señor, permítanos...

BAUTISTA: (Lo jala) ¡Déjalos trabajar, primate!

MÉDICO: En cuanto pueda, vengo a decirle lo que suceda, intente mantener la calma

Mientras se llevaban a Dani, quien no terminaba de entender lo que pasaba, ella y Alex no dejaban de mirarse y al pobre cristiano, la angustia lo rebasaba a más no poder.  Completamente desesperado, se dejó abrazar por su primo y rompió en llanto, eran lágrimas de temor y de terror, no podía ni pensar que algo le pasara a Daniela o a sus hijos, esa sola idea, lo partía al medio.

BAUTISTA: Ya, primate, relájate, todo va a salir bien, Dani ya reaccionó

ALEX: No voy a estar calmado hasta que sepa que están bien

BAUTISTA: Van a estar bien, primo (Lo abraza) Vamos a ver a mi esposa, van a tardar un rato con Dani

ALEX: No, ve tú, si quieres, no me muevo de aquí

BAUTISTA: Tienes que hacerlo, si no vas, mi esposa va a venir y no quiero eso...

ALEX: Bautista, ¿te irías tú? Déjame en paz... (Va hasta la puerta de entrada a la guardia, intentando ver algo)

BAUTISTA: Es imposible sacarlo de aquí... (Va con él) Espera que busco a alguien para que averigüe (Se fue y al cabo de un rato, regresó con un doctor) Primate, te presento a Vicente Echegaray, Chente este es mi primo, Alejandro Zavala.

VICENTE: (Le tiende la mano) Encantado de conocerte, Alejandro...

ALEX: (Lo mira) Hola...

BAUTISTA: No pongas tanto entusiasmo (Mira a su amigo) Chente, te llamé para un favor. La esposa de mi primo tuvo un accidente y míralo cómo está... ¿Podrías averiguar cómo se encuentra?

VICENTE: Puedo intentarlo. ¿Cómo se llama?

ALEX: Daniela Villalta

VICENTE: Déjenme ver... (Entra a la guardia)

ALEX: ¿De dónde lo conoces?

BAUTISTA: Cuando estuve viviendo aquí, hice muchos amigos y él es uno de ellos. Aunque por aquel entonces, Chente todavía estaba estudiando medicina

ALEX: Ah... Ve con Maru

BAUTISTA: No, me quedo contigo, ya hablé con ella cuando fui a buscar a mi amigo, no te preocupes

ALEX: Gracias, primate... (Como diez minutos más tarde, Vicente sale con un gesto tranquilo) ¿Y?

VICENTE: Todo está bien, relájate. Tiene algunas contusiones en los brazos y una cortada en la cabeza, pero es superficial. Los bebés y ella están fuera de peligro. En un momento va a salir el médico y te dará más detalles.

ALEX: (Lo abraza) ¡Gracias!

VICENTE: De nada, la familia de Titán, es también mi familia. Cuídate, tengo que volver al trabajo (Sonríe, se despide y se va)

MÉDICO: (Al poco rato, sale) ¿Familiares de Daniela Villalta?

ALEX: Soy su esposo, ¿cómo están?

MÉDICO: Están los tres bien. Sin embargo, su esposa tiene un coágulo en lóbulo temporal izquierdo y tenemos que esperar a ver cómo avanza. Daniela está un poco perdida, confundida, señor, pero no se preocupe, no es nada grave. Si quiere, en unos minutos, puede pasar a verla

ALEX: Por favor...

MÉDICO: Con permiso, en unos minutos vendrán por usted

ALEX: Gracias... (De repente, ve al tipo que causó el accidente e irremediablemente, le cae a golpes) ¡¡Maldito imbécil!! ¡¡¡Casi la matas y a mis hijos!!! (Titán solo, no pudo separarlos, se necesitaron dos enfermeros para contener a Alex) ¡¡Suéltenme!!

BAUTISTA: No lo suelten, por favor...

ALEX: ¡¡Déjenme!! Ese infeliz casi mata a mi mujer y a mis hijos (Se suelta y vuelve a caerle encima al otro) ¡¡¡¡¡Te voy a matar!!!!!

BAUTISTA: (Lo aparta) Alex, piensa en Dani, ella te necesita aquí y si le sigues, pegando van a llamar a la policía

ALEX: (Deja al tipo) ¡Más te vale que no les pase nada más, porque si llega a ser así, te mato con mis propias manos! (Se aleja)

ENFERMERA: (Sale) ¿Alejandro Zavala?

ALEX: ¡Soy yo!

ENFERMERA: Sígame, por favor...

ALEX: (Va con ella) ¿Cómo está mi esposa, enfermera?

ENFERMERA: Está bien, se volvió a despertar hace unos minutos... (Lo mira) Hay algo que debe saber…

ALEX: (La enfermera le explica algo y él entra al cuarto y se acerca) Hola, guapa... (Le besa la frente)

DANI: (Lo mira) ¿Quién eres?

ALEX: Soy Alex, tu esposo. (Le acaricia el vientre) El papá de este par... ¿No me recuerdas?

DANI: ¿Este par? Es una niña y la voy a llamar Jana (Sonríe al vientre) Tú no eres su papá, ella no tiene padre...

ALEX: (Le toma la mano y se sienta, tratando de estar sereno) Guapa, Jana ya nació, tiene casi ocho años, mira (Le muestra su celular, con la foto de ellos con los niños) Él es Gabriel, tu hijo adoptivo, ustedes se aman como locos.

DANI: No los conozco y a ti tampoco...

ALEX: (Asiente) Mírate la mano, tienes una alianza como esta, mi amor...

DANI: (Se mira) Pero yo no te conozco... ¿Dónde está mi familia? Quiero ver a mi familia...

ALEX: (Le sonríe) Tranquila, Cosita, no te abrumes. (Ve la bolsa de Daniela) ¡Ya se! (Saca la billetera de ella y le muestra las fotos) Estos son tu papá y tus hermanos y ellas son Giselle y Ari, tus cuñadas y aquí tienes a Maru, que dicho sea de paso, está en este hospital, acaba de dar a luz a su segunda hija y le puso Victoria, por ti. Ella está casada con mi primo Bautista. ¿Quieres que la llame?

DANI: (Muy confundida) Si, por favor, quiero ver a mi Munita, hace tiempo que no la veo, desde que se fue a viajar por el mundo...

ALEX: En un momento voy por ella. (Le besa la mano) Dani, se que no me recuerdas, pero mírame, eres el amor de mi vida y no voy a hacerte daño, no me tengas miedo.

DANI: Es que no me acuerdo de ti...

ALEX: Lo se, hermosa... (Saca su celular) Titán, trae a Maru, Dani necesita verla. Estamos en la habitación 119. Gracias. (Deja el teléfono a un lado) Mira esta foto. Esa es Tami, mi hermana y la bebita es Martina. ¿Sabes cómo te dice?

DANI: No, ¿cómo me dice?

ALEX: Nani. Bueno, Lucía y Martina te dicen así. Te adoran y tú estás loquita por ellas. (Busca otra fotografía) Ve esta, aquí estás con las dos... Lucía es la hija mayor de tu Munita

DANI: ¿Tiene una hija? ¿Cuándo se embarazó? Esta niña siempre sorprendiendo a la familia...

ALEX: ¡Eso no te lo discuto, preciosa! (La mira) ¿Cómo te sientes?

DANI: Me duele un poco la cabeza, pero estoy bien. ¿Dónde está mi mamá?

ALEX: Tu mamá no está, mi amor. Estamos en Málaga, vinimos con nuestros hijos porque Gabo tiene un mundial infantil de fútbol. El renacuajo es excelente y te dedica todos sus goles, que son muchos, eh. Él dice que eres su "mamá novia". (Golpean la puerta) Ahí vengo... (Alex sale y le explica la situación a Maru y Titán)

MARU: (Entrando con Lucía) Hola, tía Dani...

LUCÍA: ¡¡Naniiiii!!

DANI: (Empieza a llorar) Hola, Munita...

MARU: (Le besa la frente) Tranquila, primita...

LUCÍA: Nani llora, mami, no llore... (Le da su osito) Calota ama, Nani

DANI: (Sonríe entre lágrimas y coge el osito) Gracias, guapa (Mira a su prima) ¿Es tuya, Muni? Es igualita a ti

MARU: Es mía, toda mía, pero no es la única. Victoria nació ayer. (Entra Bau)

BAUTISTA: Lu, vamos a ver Vicky, hija, ¿quieres saludar a tu hermana? (Se acerca a Dani) Hola, primita, gracias a Dios que estás bien

LUCÍA: ¡¡Shiiii, Vityyyyy!! Mamo, papi, ¡¡mamoooo!

MARU: ¿Quién es él, Muni?

DANI: Es mi marido, Bautista Zavala. Es primo de tu esposo, Dani

BAUTISTA: Las dejo para que hablen. Alex se queda ahí, en la puerta. Amor, cualquier cosa, nos dices... (La besa y sale con Lucía)

MARU: Dani, quizás esto no sea lo ideal, pero tienes que darte cuenta de dónde estás, Munita. Ese embarazo, no es de Jana. Esa enana hermosa, tiene casi ocho años y tú estás esperando mellizos

DANI: (Abre los ojos exageradamente) ¿Mellizos?

MARU: (Asiente) Una niña y un niño. (Le acaricia la panza) Pedro y Angélica, para ser precisa y estás más que feliz. Los esperas con mucha ilusión y los concebiste junto al amor de tu vida

DANI: ¿El papacito que estaba aquí? ¿De verdad es el papá de estos bebés?

MARU: (Se ríe) Si, ese mismo y no solamente es papá de esos dos, también lo es de Jana. La adoptó, le dio su apellido y se adoran, Dani. Ellos dos, Gabriel y tú, han formado una familia de sueños.

DANI: ¿Por qué no me acuerdo?

MARU: Tienes un coágulo en esa cabecita y según el médico, eso te genera este trauma. A medida que se vaya disolviendo, todo va a volver a ti. Es una cuestión de tiempo y paciencia.

ALEX: (Entra) Perdón que las moleste, pero tu papá quiere hablarte, Cosita... (Le da el celular)

DANI: (Mira a su prima) ¿Cosita? (Se encoge de hombros y coge el celular) ¿Papi?

MARU: (Ve que Alex sale mal) Alejandro... (Hace un gesto de resignación)

ALBERTO: Hola, princesa, ¿cómo te sientes?

DANI: Bien, papi, pero al parecer perdí un poco la memoria. Me dicen que Jana ya nació y que tiene 8 años y no me acuerdo de eso...

ALBERTO: Lo se, mi cielo, tu marido me lo explicó y ya salgo para allá, en unas horas me tendrás contigo. No te vuelvas loca tratando de entender, ¿si? Sólo confía en Alex, en tu prima y verás cómo todo vuelve a la normalidad muy pronto.

DANI: ¿Él me quiere papá? ¿Me quiere de verdad?

ALBERTO: Dani, hija, Alejandro y tú, no se aman, se adoran y ambos viven y se desviven por el otro. Princesa, estoy saliendo para el aeropuerto, esta noche estaré allí. Tengo que cortar

DANI: Está bien, papito, nos vemos más tarde, te amo...

ALBERTO: Y yo a ti, mi vida... (Cuelga)

Maru miró a su prima, que se veía envuelta en su confusión, cosa que era lógica, a causa del estado en el que se encontraba. Le tomó la mano a Dani y le volvió a acariciar el vientre.

MARU: ¿Necesitas algo, Muni?

DANI: No se...

ALEX: (Varios minutos después, afuera del cuarto de Dani, recibía a sus hijos) Hola, enanos... Mónica, gracias por traerlos tan rápido

JANA: ¿Mi mamá y los melli están bien, papi?

ALEX: Si, Hadita, pero mami está un poco confundida y no recuerda muchas cosas

JANA: ¿Qué cosas?

ALEX: Ella cree que tú aún estás en su panza, en vez de los mellizos. Aguarden aquí, a ver si pueden entrar. Le voy a decir que están esperando (Besa a los niños y entra) Daniela, tus hijos vinieron a verte, ¿te animas a recibirlos?

DANI: Si, pero antes quiero hablar contigo...

ALEX: Claro, claro

MARU: Voy con los niños... (Beso a Dani y a Alex) Tranquilo, Munito

ALEX: Si, primita, gracias... (Maru sale y él se sienta junto a Dani) Tú dirás

DANI: Quiero que respondas algo y sinceramente

ALEX: Lo que sea, pregunta

DANI: ¿Somos felices?

ALEX: Mucho, como los dos soñamos serlo, Dani. Por supuesto que tenemos nuestras discusiones, pero este amor, nos salvó la vida a los dos y a los enanos. No lo dudes

DANI: No lo dudo, sólo intento recordar. ¿Mis hijos me quieren?

ALEX: Jana te idolatra, es tu viva imagen y eres su heroína y Gabriel te amó desde antes de saber que eras mi novia. De hecho, cuando lo supo, te pidió que me botaras y fueras novia de él. ¡Y tú lo aceptaste! (Sonríe) Un minuto más tarde, terminaron porque no sabes jugar a la play y bueno, no te quedó más opción que volver conmigo.

DANI: (Sonríe) Respóndeme algo más, ¿soy buena mamá?

ALEX: ¡La mejor! Tanto confiamos el uno en el otro, que adoptamos a nuestros niños y les dimos el apellido de cada uno. Gabriel y Jana, son Zavala Villalta.

DANI: Gracias (Sonríe) Ahora si, diles que pasen

ALEX: Prepárate, porque están más asustados que yo...