Capítulo 323

Alejandro aguardaba que apareciera algún taxi y vio a Daniela salir. Ella sonreía y se acercaba a él.

ALEX: Hola, guapa

DANI: Hola, guapo (Lo abraza y besa) ¿No te vas a ir de la casa, verdad?

ALEX: No, Dani, sólo digo que si eso necesitas, lo hago. Además, nosotros tenemos otros planes, ¿no?

DANI: No quiero que te marches de la casa...

ALEX: No me voy a ningún lado...

DANI: No me dejes... (Lo abraza fuerte)

ALEX: (La aferra) Ni loco te dejo (La besa) Eres mi principio y mi final, hermosa...

ALBERTO: (Sale con Néstor y Clara) Muchachos, Lucía se queda con sus papás aquí.

ALEX: Entonces, vamos, creo que todos necesitamos descansar. Una buena noche de sueño, nos va a ayudar

ALBERTO: Si, vamos...

Alejandro detiene dos taxis y se van. Al llegar, entre Clara y Dani preparan una cena rápida y los hombres se retiran a organizarse en los cuartos. Alberto va hasta la recámara principal y nota que su yerno no está bien. Se sienta a su lado y lo abraza

ALEX: Sentí tanto miedo de perderlos...

ALBERTO: Te entiendo...

ALEX: Lo se, señor, se que usted comprende y gracias por haber venido tan rápido. Ella lo necesita

ALBERTO: Te necesita más a ti, aunque no recuerde nada

ALEX: Puede ser, pero ahora lo que mejor le hace es tener a su familia a su lado. (Alberto lo mira) No se preocupe, Dani me tiene y eso no va a cambiar, la siento tan mía como siempre.

ALBERTO: ¿Entonces? Te necesita a ti para recordar...

ALEX: Y me va a tener, suegro...

CLARA: (En la cocina, con Dani) ¿Cómo te sientes, muñequita?

DANI: Muy bien, pero ya quiero recordar a Alex...

CLARA: (Sonríe) Está guapo tu marido, condenada, aprovéchate y redescúbrelo

DANI: ¿Redescubrirlo?

CLARA: Si, Dani... (Deja lo que está haciendo) Tú sabes muy bien que yo no tengo pelos en la lengua y que digo lo que pienso, sin filtros y ese zopenco, es un excelente hombre. Mira, preciosa, esa pérdida de memoria puede resolverse muy pronto o tal vez, se demore. Mi consejo, hijita, es que vuelvas a conocerlo, te puedo asegurar que te vas a volver a enamorar en un segundo

DANI: Esta noche empiezo a reconocerlo (La besa) Gracias, tía Clarita (Sonríe)

CLARA: De nada, chiquita, pero no me digas Clarita y no vayas de decirle a ese menso que me cae bien. Tanto él como su primo son dos hombrones, pero si creen que no los quiero tanto, los puedo mantener a raya. Al fin que se llevaron a mis dos princesitas...

DANI: Muy buena estrategia, titita...

CLARA: Jajajaja... ¡Lo se!

NÉSTOR: Clara, ¿falta mucho para cenar? Tengo hambre...

CLARA: ¡Ya te pareces a Lucía! "Hambita, buela, hambita"... ¿Quieres el biberón, Néstor? Jajajaja

DANI: Jajajaja, ¡te pasas, tía! Tío, ¿dónde está Alex?

NÉSTOR: En tu cuarto, con tu papá, muñeca.

DANI: Gracias, tío (Le da un beso y va en busca de su esposo) Dios, ¡cómo pesa esta barriga!

ALBERTO: (Se encontró a su hija en las escaleras) ¿Te ayudo, princesa?

DANI: Si, por favor, pa... (Sonríe) ¿Dónde está Alex?

ALBERTO: (La agarra de un brazo, ayudándola a subir) En la alcoba, hablando con tus suegros...

DANI: Gracias por ayudarme, papá, esta barriga pesa una tonelada...

ALBERTO: Y, cielito, son dos, tu marido y tú, cuando la hacen, la hacen, jajajaja.

ALEX: (Al teléfono) Si, mamá, Daniela está bien, es cuestión de tiempo.

CARMEN: ¿Seguro, hijo?

ALEX: Si, señora preocupona. Me conoces y sabes que si las cosas no estuvieran bien, estaría vuelto loco...

ALBERTO: (Llegan a la recámara) Nos vemos en la cena... (Le besa la frente y se retira)

ALEX: No, mamá, no seas cansona, por favor. No vengan. Ahora lo importante es que esté la familia de Dani y Maru. Dejen las cosas como las tenían planeadas con Tata

DANI: (Entra) Hola, mi amorcito (Sonríe) ¿Con quién hablas?

ALEX: Hola, Cosita, hablo con mi madre, la preocupona número uno... (Pone el altavoz)

CARMEN: ¿Qué dices, Alejandro Federico? ¡No te hagas el gracioso!

DANI: Hola, suegrita, deje de preocuparse, estoy bien, se lo aseguro yo y, si no le importa, su hijo va a colgar porque le voy a hacer el amor...

CARMEN: Demasiada información, Dani, pero me alegra saber que estás bien. Adiós, bebés... (Cuelga)

ALEX: (Miraba a Dani, completamente idiotizado) ¿Qué dijiste?

DANI: Lo que escuchaste (Se acerca a él lentamente y lo besa muy apasionadamente)

ALEX: ¿Si? ¿Escuché bien, Cosita? (Se deja besar) Me encanta que te pongas así, amor...

DANI: ¿Así, cómo?

ALEX: Como me buscas, me seduces, eres tan hermosa y te amo tanto, Dani

DANI: ¿Mucho? (Lo besa más mientras lo empuja hasta la cama, hasta que cae en ella) Menos mal que cerré con llave...

ALEX: Si, guapa.... (Sonreía plenamente) Este cuerpecito, es todo tuyo...

DANI: Y este es tuyo si lo quieres... (Lo desviste por completo) Uff, antes no me fijé bien en ese cuerpo (Se muerde el labio inferior)

ALEX: Puedes ponerte al corriente ahora... Te quiero toda mía, preciosa

DANI: Toda tuya (Recorre su cuerpo con besos en cada rincón, cuando llega al soldado, se entretiene abajo, hasta hacer delirar a Alejandro)

ALEX: ¡Dani, Dios! (Se aferraba a las sábanas, para contenerse) Me vas a matar, amor...

DANI: Eso nunca (Siguió hasta hacerlo estallar, luego se desvistió y se subió sobre él, haciendo que la penetrara)

ALEX: (La besa como puede y la toma de las caderas) Veo que tu cuerpito no olvida cómo hacerme vibrar, Cosita... (Se mueve él debajo)

DANI: Dicen que el cuerpo no olvida... (Siguió moviéndose a un ritmo muy placentero)

ALEX: ¿Quieres cambiar la postura? Me encantaría complacerte a ti

DANI: Aquí estoy perfecta

ALEX: (Sonríe, entre gemidos y jadeos) Dame más, entonces...

DANI: Por supuesto (Así lo pidió y así lo tuvo, Daniela le dio todo lo que tenía)

ALEX: (Llegaron al clímax juntos. La abrazó y besó largamente) ¿Sabes qué? Aunque no le recuerdes, te amo más que a mi vida y somos muy felices juntos. Ninguno de los dos cambiaría la vida que llevamos, pero hay algo que creo que tengo que decirte.

DANI: Dime...

ALEX: En la pelea que tuvimos, dijimos un montón de estupideces, porque, bueno, eso hacemos cuando nos enojamos. La cosa es que el motivo fue Diego, Dani... (Le explica a grandes rasgos lo sucedido) A mí me da miedo que él aparezca y Jana se ilusione, porque va a salir lastimada. Nuestra Hadita es muy emocional, como tú y no quiero que ese idiota vuelva a herirlas. Sólo que lo dije de una forma ambigua, pero no me refería a lo que tú pensaste, te lo juro por nuestros renacuajos.

DANI: Te creo (Lo besa) Y Diego no se va a acercar a nuestra hija, él la abandonó antes de nacer, ahora no tiene ni derecho a nombrarla

ALEX: ¡Claro que no tiene derecho! Pero Sabrina es media hermana de Jana y nuestra niña quiere conocerla, tratarla. Hay muchas cosas que tienes que saber, amor. (La mira) Siento que si no te cuento todo, te estoy como mintiendo o algo así...

DANI: ¿Qué más hay?

ALEX: Mucho, Cosita. ¿Qué dices si nos vamos a donde te dije antes y te cuento bien? Nuestra historia tiene condimentos que parecen de película

DANI: Pues, vámonos ya... (Lo besa) Por cierto, me encantó abusarme de ti (Sonríe y se levanta)

ALEX: ¡Tienes la libertad de hacerlo cada vez que te den ganas! (Se visten y bajan) Suegro, tíos, nosotros nos vamos. Mañana regresamos después de recoger el carro de renta.

ALBERTO: ¿No van a regresar a dormir?

DANI: No, papá, voy a abusar sexualmente de mi marido toda la noche y para no molestar, me lo llevo a otra parte, sean felices y no se duerman tarde, que los conozco, los quiero (Les manda un beso) ¿Nos vamos, amor?

ALEX: Creo que no queda más que decir, Dani, eres muy explícita, mi amor

CLARA: ¡Esa es mi sobrina! ¡Adiós, niños!

DANI: (Salen y Alex la miraba raro) ¿Qué pasa? (Se mira completa) ¿Qué tengo?

ALEX: Me pasa que cada segundo que pasa, te amo y te deseo más...

DANI: ¡Menso! Pensé que tenía algo fuera de lugar o alguna cosa rara (Le agarra la mano) Vamos...

ALEX: Jajajaja, no puedo evitar ponerme menso contigo... (Comienzan a caminar)

DANI: ¿No puedes ir contándome la historia desde aquí? Así cuando lleguemos a nuestro destino, puedo hacerte mío otra vez...

ALEX: Uhh, si, amor, te cuento todo mientras caminamos... (Le pasa el brazo por los hombros, pegándola a su cuerpo) Bien, cuando nos conocimos, se suponía que yo era viudo y... (Le empezó a contar la historia)

DANI: (Cuando llegaron al destino, ya sabía todo) Muy interesante, pero parece ficción...

ALEX: Lo se, pero lo sufrimos con mucha realidad. Sobre todo Gabo, pero tú supiste contenerlo, lo llenaste de amor y de apapachos.

DANI: ¿Cómo no hacerlo si desde que lo conocí en la oficina, me enamoré de él? Aún antes de saber que era tu hijo... (Miraba al horizonte mientras hablaba)

ALEX: (Se sorprende, pero no dice nada) El día que te chocó, ¿verdad?

DANI: Si, iba por su pelota de fútbol, que se le había escapado escaleras abajo... (Sonríe)

ALEX: (La abraza por detrás) Él se enamoró de ti ese mismo día, hermosa. ¿Sabes lo que me dijo después? Porque aquel día se quedó en Frama mirando un partido conmigo y sólo habló de ti...

DANI: ¿Si? ¿Qué decía ese bandido de mí?

ALEX: Que mientras le ponías una bandita en la rodilla, le hablabas como una mamá y que una mamá como tú, era lo que más quería en la vida... Dani, lo estás recordando

DANI: (Lo mira) ¿Qué, amor?

ALEX: A Gabriel, cielo, a tu hijo, estás recordando cuando lo conociste

DANI: (Se da cuenta) Estoy recordando, amor... (Lo besa) Gracias por estar conmigo...

ALEX: Siempre voy a estar contigo, hermosa, no existe otro sitio para mí, sólo quiero estar donde estés tú

Más allá de la falta de memoria parcial, Daniela no podía negar lo que Alex le generaba. Lo sentía tan suyo, se sentía tan arraigada a él y esa pertenencia, la llenaba de paz…

DANI: Te amo (Lo besa) Te amo tanto...

ALEX: ¿Si me amas?

DANI: Si, aunque no te recuerde aún, el amor por ti lo siento aquí (Se toca el corazón) Clavado bien hondo aquí...

ALEX: (Se besan) ¿Hay algo más que quieras saber? ¿Tienes alguna duda?

DANI: Con saber que somos felices, no me hace falta más nada, bueno, si ¿de cuántos meses estoy? Porque esta barriga pesa un quintal y medio...

ALEX: Seis meses, mi amor. Esa barriga sexy, es de seis meses... ¿Comemos?

DANI: Sexy porque tú no cargas con ella... Si, vamos a comer porque muero de hambre, ¿seguro que llevo niños y no caníbales aquí dentro?

ALEX: Eso si no lo se, Cosita, pero si que son muy tragones, como el papá y para mí tu pancita es sexy, toda tú lo eres... (Se sientan. Estaban en una suite de un lujoso hotel y pidieron la cena al llegar)

DANI: Es muy bonito este lugar (Sonríe, mirando alrededor de la habitación)

ALEX: Supongo que si... (Sonríe mirándola a ella)

DANI: (Lo mira) ¿Por qué me miras así?

ALEX: ¿"Así"? ¿Cómo es "así"?

DANI: Así, mira (Pone la misma cara de boba de Alejandro)

ALEX: Ahhhhh, jajajaja, porque me pareces hermosa y mirarte, es un agasajo

DANI: (Va con él y lo besa) ¿Siempre eres así de bueno, de romántico y cariñoso?

ALEX: En general, si, salvo que no me dejes serlo, cosa que sucede a veces

DANI: ¿Yo no te dejo? (Lo besa) Dios, mira que soy tonta (Lo vuelve a besar) ¿Cuándo no te dejo?

ALEX: Es que hay días que los renacuajos caníbales te alteran mucho, te agotan y pues, no estás de ánimos para tu hombretón cariñoso y cachondo, pero no es frecuente, amor. (Le habla al oído) Sueles ser insaciable, como yo...

DANI: Ya quiero que nazcan estos dos, para demostrarte de todo lo que soy capaz (Sonríe y le habla al oído ella) Hazme el amor en el balcón...

ALEX: ¿Ahora?

DANI: Si...

ALEX: ¡Claro, mamacita! (La carga y la lleva, besándola) Hagamos el amor en el balcón, como dice la canción... (Besaba y metía mano por doquier)

DANI: Me encanta tu mano suelta, no soy nada tonta para elegir marido...

ALEX: De tonta no tienes un pelo, pero me costó lograr que aflojaras... (Le quita la camisita y besa el torso de su mujer) Estabas de necia con que no querías ningún hombre revolucionando tu vida...

DANI: ¡Cómo me equivocaba! Es que tenía miedo a que fueras como el imbécil de Diego, eso fue todo...

ALEX: Mmm, no lo menciones ahora, por favor, que se me bajan las cosas...

DANI: ¿A quién? No he nombrado a nadie, sólo a ti y a mí...

ALEX: (Se sienta en un sillón de terraza y la atrae hacia él) Ven, Cosita divina...

DANI: (Va con él) Qué hermoso eres…

ALEX: ¿Yo? (Le levanta la falda y le baja las pantys) Tú eres hermosa, yo estoy guapo nomás (Le sonríe)

DANI: No, eres hermoso (Le acaricia el rostro) Siempre te lo he dicho... (Lo besa)

ALEX: Bueno, si me lo dices, Dani, es cierto y también me dices “precioso”, “culo bonito”... (La hace sentarse en su regazo, a horcajadas)

DANI: (Lo hace) Y buenorro (Sonríe)

ALEX: Buenorro... (Se mueve un poco) Pero extraño un sobrenombre en particular...

DANI: ¿Cuál, Cosito?

ALEX: (Sonríe) Ese mismo, amor... (La toca íntimamente y ella gime) Mmm, amo escucharte...

DANI: Y yo te amo a ti...

ALEX: Tócame, amor y ámame bien a lo "Dani"...