miércoles, 7 de agosto de 2013

Capítulo 329

Maru se enoja por el comentario de su madre y explota, como pocas veces lo había hecho en su vida…

MARU: Deja de decir estupideces, Clara, ¿quieres? Mi marido es el mejor hombre del mundo, mucho mejor esposo, de lo que tú eres como madre, así que, cierra el pico (Se levanta) Me voy a mi cuarto
CLARA: Gracias por decírmelo... (Se va)
DANI: Te pasaste, Muni...
MARU: Es la verdad, Daniela, mi mamá no fue una madre ni amorosa, ni presente. No te olvides que mientras Julián y yo vivíamos en casa con papá, ella se largaba a viajar por el mundo. Quien más se hacía cargo de nosotros, era tu mamá. Que sea una excelente abuela, no le quita lo mala madre, eh. ¿Qué le critica a Bautista? Se desvive por mis hijas y por mí, siempre está presente y por una vez que necesita dar una vuelta, ¿me viene a decir que no me conviene?
NÉSTOR: Igual, Maru, no debiste decir eso
MARU: No, papá, no debí callarlo tantos años... (Llega la ambulancia)
DANI: No te digo nada más, sólo que pienses cómo te sentirías, si lo escucharas de alguna de tus hijas (Se levanta) Voy a ver a mi esposo...
MARU: Si tratara a mis hijas como mi madre lo hizo conmigo, lo tendré bien merecido, Daniela.
NÉSTOR: (Fue a abrir la puerta) Pase, doctor, es ella...
DANI: (Antes de ir a ver a su esposo, pasó por el cuarto de su tía y la encontró haciendo las maletas) ¿Qué haces, tía?
CLARA: Las maletas, ¿o es que no ves?
DANI: Si veo, pero, ¿por qué?
CLARA: Porque no quiero estar donde no me quieren...
DANI: No le hagas caso a Maru, no lo dijo queriendo, fue el momento de enojo...
CLARA: No, Dani, no es eso, se que lo siente desde hace mucho, pero no se había atrevido a decírmelo. No intentes convencerme de otra cosa, porque conozco a mi hija y se cuándo dice las cosas porque las siente de verdad. Ahora, déjame terminar de preparar la maleta y ve con tu prima, ella te necesita
NÉSTOR: (Entrando a la recámara) Tú no te vas a ningún lado, Clara y no voy a discutir. Te la pasaste viajando y ahora ves las consecuencias. Te quedas y hablas con tu hija de una maldita vez. (Hace un ademán de silencio a su esposa) No es opcional, te quedas y punto. Dani, corazón, Maru está con el médico y tu marido. (Dani sale) No hagas una escena de novela, Clara y acepta que parte de lo que dice la niña, es cierto. De otro modo, las dos se van a perder y dudo que sea lo que quieren. Ve esto como la oportunidad de arreglar las cosas. (Sale)
MARU: (El médico la revisaba) Me siento bien, debo estar anémica o algo y por eso me mareé.
MÉDICO: Por ahora, no tiene nada. ¿Ha estado recientemente en el hospital?
CLARA: ¿Cómo le cuento a mi hija que viajaba para curarme y que no me viera enferma? ¿Cómo se lo explico a mi esposo?
MARU: Di a luz hace una semana
ALEX: (Había subido a buscar la bata de Dani y la escuchó. Entró a la alcoba) Señora, ¿qué le pasó?
CLARA: Nada, muchacho, ¿cómo está mi hija?
MÉDICO: Ese puede que sea el motivo, su cuerpo aún está débil, no debe preocuparse. De todas maneras, mañana a primera hora, asista al doctor para que la revise mejor, ¿si?
ALEX: Bien, no le va a pasar nada... (La toma de los hombros y la mira fijamente) Si dice la verdad, su familia la va a entender, pero si sigue callando, ninguno podrá comprender y sentirán que los vuelve a abandonar. Maru es muy parecida a usted y se que a veces ambas son muy necias, pero se aman. Confíe en ella, en Julián y en su esposo. Si yo la quiero y no es nada mío, imagine el amor que ellos sienten por usted. (Le besa la frente) Enfermarse, no es pecado, pero ocultar y mentir, puede hacerlos creer que no los ama. (Sale)
BAUTISTA: (Llegaba a la casa y se asusta al ver la ambulancia en la puerta. Entra como loco) ¿¿Qué pasó??
DANI: Tu esposa, que quería llamar la atención (Sonríe para aliviar la tensión)
BAUTISTA: (Se acerca corriendo a su esposa) ¿Qué te pasó? ¿Estás bien? ¿Qué tienes? Lo siento, fue mi culpa...
MARU: ¿Tu culpa? No, mi amor, me mareé porque estoy débil y me caí a la alberca.
MÉDICO: Se golpeó la cabeza y perdió el conocimiento, señora, no desestime lo que sucedió. Mañana vaya al doctor sin falta y no se duerma por las próximas cuatro horas. Si se siente mal, vuelva a llamar. (Se retira)
ALEX: (Bajando) Toma, Cosita (Le entrega la bata)
MARU: (Abraza a Bau) Quita esa cara, mi amor, no pasa nada de nada...
BAUTISTA: Si pasa, me fui y mira lo que te pasó, soy un menso. Lo siento por enojarme, olvídate de todo lo que te dije, eran bobadas mías. Mañana vamos al doctor sin falta, no me pienso separar más de ti en mi vida (La abraza fuerte)
ALEX: Creo que estamos demás, Dani, volvamos a la cama...
NÉSTOR: Voy a ver a mi señora esposa (Besa a su hija) Cualquier cosa, nos avisas
MARU: Papá, dile que venga... (Se vuelve a Bau) Nada es tu culpa, mi Chocolate hermoso, fue una casualidad, pero eso que no te separes de mí nunca más, me fascina
BAUTISTA: Todo es mi culpa...
MARU: ¡Eyyy! No digas eso, no es verdad (Lo besa) Si hubieras estado en el cuarto, lo mismo me hubiera caído. Fue un mareo, nada más. Y lo que dijiste, todo es cierto, no dejes que el miedo te quite la voz. Te amo mucho (Beso) Mucho (Beso) Mucho (Beso) Mucho (Beso) Mucho y más que mucho
BAUTISTA: No, yo no dije nada, olvídate ¿si? Te amo (La besa) Te amo...
NÉSTOR: (Llega con su hija) No está...

Clara se había ido por la puerta trasera de la casa, no se sentía preparada para enfrentar a su hija. Maru, por su parte, no terminaba de entender lo que su papá le acababa de decir.

MARU: ¿Cómo que no está? ¿Dónde se metió?
NÉSTOR: Se fue (Le da una nota) Dejó esto...
MARU: (La toma y la lee) No puede ser... (Le da la nota a Dani) ¡Llévame al aeropuerto, Chocolate!
DANI: (Lee en voz alta) "Querida hija, siento en el alma haber sido tan mala madre, no tuve elección. Ahora no te puedo explicar el por qué, pero cuando vuelvan a las islas, les contaré a tu hermano, tu papá y a ti, el motivo de tantos viajes. A esto me arriesgaba, pero prefiero que me odien a que sufran. No me busques hasta que vuelvas, necesito un tiempo para poder organizarlo todo y contarles mis motivos. Ni se te ocurra ir a buscarme al aeropuerto, recupérate y cuando estés bien, ya tendremos tiempo para hablar. Se feliz, hija. Te ama, tu madre"
BAUTISTA: (Mira a su esposa) ¡Ya lo se, pero tú te quedas! Alex, ¿me acompañas?
ALEX: ¡Claro, muévelas! (Besa casa uno a su esposa y se van)
MARU: Voy a cambiarme...
DANI: ¿A dónde vas?
MARU: A ponerme ropa seca, Munita
DANI: Te acompaño, pero tienes que ayudarme...
MARU: (Lo hace) Vamos, panzona...
NÉSTOR: ¿Quieren un te?
MARU: Si, papi, gracias...
DANI: Gracias, tío y no te preocupes...
NÉSTOR: No lo hago...
ALEX: (En el camino, le contó a su primo lo que había escuchado) Supongo que ha de ser por eso, no se anima a enfrentarlos
BAUTISTA: En la nota decía que tenía que preparar todo, a lo mejor se refería a las pruebas...
ALEX: No se, pero si se va sin hablar con Maru y don Néstor, las cosas se van a poner peor...
BAUTISTA: Lo se, ojala y lleguemos a tiempo...
MARU: (Hacía rato que ya estaba cambiada y ahora ella y su prima, checaban a los niños) Menos mal que los enanos no escucharon nada, Muni
NÉSTOR: (Entra) Llegaron los muchachos, no la pudieron alcanzar...
MARU: Pues, mañana, después de ver al doctor, nos volvemos, papá. Hay algo aquí que no me gusta nada
NÉSTOR: A mí tampoco, hija, pero Victoria aún no puede viajar...
MARU: Papá, por favor, tenemos dinero suficiente como para alquilar uno de esos aviones sanitarios. Tú no te preocupes, yo me encargo de arreglar eso, pero algo pasa con mamá, de lo contrario, todavía me estaría desgreñando por haberle dicho lo que le dije...
BAUTISTA: Si pasa algo, Chocolata y aunque no sea yo quien deba hablar, no puedo ocultarte esto. Bajemos y así les contamos bien

Los cinco se reúnen en la sala y Alex les cuenta lo que escuchó. Esto, sumado a la actitud de Clara, llevó a estallar a Maru. Lo primero que hizo, fue llamar a su hermano y contarle las novedades. Después, un poco más tranquila, gracias a Julián, volvió a la sala con los demás.

MARU: Julián va a ir por ella, papá.
NÉSTOR: ¿Por qué no confió en nosotros?
MARU: No se, pa, no me preguntes.
ALEX: Tal vez creyó que al guardarse eso para ella misma, no les provocaría dolor...
LUCÍA: (Bajaba despacito, llorando y agarrada de los palos de las escalera) ¡¡Mami no etaaaaa!!
BAUTISTA: Aquí está bebé (Fue hasta su hija y la alzó) Mírala, está con el abuelo y con Dani y Tato (Le da un beso) Vamos con ella, ¿si? Pero no llores...
MARU: (Agarra a Lu) Aquí estoy, hija, no me fui
LUCÍA: (La abraza) Mumí, mami... (Hace lo mismo de siempre y se duerme)
MARU: Es que hoy no le di su besito...
BAUTISTA: No, no se lo diste, voy a preparar un poco de café (Se va)
MARU: (Va detrás de su esposo, con la niña dormida en brazos) ¿Qué te pasa, Bautista?
BAUTISTA: Nada, Chocolatita (Sonríe y la besa) Ve con tu papá, te necesita para digerir la noticia, yo voy a preparar café para todos...
MARU: Vale...
NÉSTOR: No lo puedo creer...
DANI: ¿Qué, tío? ¿Que se los haya ocultado o que estuviera enferma?
NÉSTOR: Las dos cosas, hija, Clara no debió actuar así. La enfermedad, no se cuál haya sido, pero su proceder, no fue correcto
DANI: Se que no fue correcto, pero no actuó de mala fe, no quería verlos sufrir. Ustedes tres son lo que más quiere en la vida, sin duda, yo haría lo mismo con tal que no sufriera mi familia...
MARU: No, Dani, eso no es así. ¿Sabes lo que estamos sintiendo nosotros? ¿Qué piensas? Para mí es más doloroso haber crecido lejos de ella que saberla enferma
NÉSTOR: Yo hubiera querido acompañarla, darle fuerza...
ALEX: Dani, ¿qué hubieses sentido si yo no te decía nada de lo de mi cirugía?
DANI: Ya dije que no fue lo correcto, pero tampoco hay que crucificarla por la decisión que tomó y no se, Alejandro, no se cómo me hubiese sentido, porque no me acuerdo de mi maldito pasado (Se levanta y se va) Relájate, Dani, relájate...
ALEX: (La alcanza) No te enojes conmigo, Dani, no lo dije por eso. (La abraza) Estamos todos nerviosos y reaccionamos de mala manera, calma, por favor
DANI: Déjame sola, Alejandro, por favor (Se zafa de él) Necesito estar un rato a solas...
ALEX: ¡¡Vale!! (Se va a su cuarto)
MARU: Me parece que todos necesitamos descansar, papá
NÉSTOR: Si, será lo mejor... (Se levanta) Vamos, te acompaño
MARU: Mejor lleva a Lu, pa, yo voy a decirle a Bau que no prepare nada...
NÉSTOR: Está bien, ve (Coge a su nieta y sale)
MARU: (Llega a la cocina) Guapísimo, no hagas café, amor
BAUTISTA: (La mira) ¿No quieren?
MARU: (Lo besa) Tu primo y mi prima, discutieron y se fueron, papá se fue a dormir con Lucía y yo, prefiero quedarme contigo, abrazada
BAUTISTA: (La abraza) Pues, nos quedamos abrazados (Le besa la cabeza)
MARU: Mmm... Si, me quiero quedar así, amor
BAUTISTA: Vamos a la sala, nos sentamos allí y vemos la tele un rato, así abrazados (La besa y la alza)
MARU: Gracias, hermoso...
BAUTISTA: ¿Por qué me das las gracias?
MARU: Por estar, por tu amor y por aguantar mi coco quemado
BAUTISTA: Estoy porque quiero, te amo porque no se hacer otra cosa y te aguanto porque te amo, no tienes que darme las gracias por nada de eso...
MARU: Se que no tengo que hacerlo, pero quiero, Bau... (Se sientan) Y hay algo más que quiero hacer, pero necesito que estés de acuerdo
BAUTISTA: ¿Qué pensó esa cabecita loca? (La besa)
MARU: Nada de cabecita loca. Con todo lo que ha pasado últimamente, me doy cuenta que esta familia necesita un cambio. Pienso en dejar la radio una temporada, amor y dedicarme a ti, a las niñas y a mis papás
BAUTISTA: ¿Dejar la radio?
MARU: Por un tiempo, ¿qué piensas?
BAUTISTA: Que es tu decisión, si crees que es lo mejor en este momento, yo te apoyo (La besa)
MARU: Pero, ¿estás de acuerdo? (Otro beso) Imagina que llegas a casa y estamos tus tres mujeres esperando por ti y te llenamos de besos y apapachos...
BAUTISTA: Me encantaría, pero todo eso si tú vas a estar feliz y contenta, si te hace falta la radio, no quiero que la dejes...
MARU: La radio es mi vocación y en algún momento, retomaré, pero tú eres mi amor, mi hombre, mi vida y eres lo primero para mí.
BAUTISTA: ¿Estás segura de esto?
MARU: (Le da un besote) ¿Eso te respondió?
BAUTISTA: No...
MARU: (Sonríe) Déjame checar a papá y a Lu y regreso a responderte de nuevo
BAUTISTA: Ve (La besa)
MARU: (Va hasta la recámara de su padre y él dormía, abrazado a Lucía, que también descansaba tranquila. Besa a ambos en la frente y sale. Vuelve a la sala) ¿Bau?
BAUTISTA: (Se había dormido, quería esperarla, pero el sueño lo venció, ahora soñaba) Te amo más que a mi vida, pero no soporto esto...
MARU: ¿Qué no soportas, Chocolate?
BAUTISTA: ¿Qué no soporto? Que mi hija te quiera más a ti, que sólo te haga caso a ti, que papi sólo esté para comprarle cosas o para sacarla a pasear, ¿parezco un niño? Pues, si, pero es lo que siento, después viene mi primo y me dice que no te trate mal, ¡ja! ¿Cuándo te he tratado mal? Nunca, pero claro, a mi primito le importa una mierda lo que yo sienta, sólo se preocupa de mi mujer, como si yo fuera un estúpido
MARU: (Lo despierta) ¡Bautista Nicolás!
BAUTISTA: (Se sobresalta y se levanta de golpe) ¿Qué pasó? ¿Te sientes mal? ¿Pasó algo con las niñas?
MARU: (Lo mira, al borde del llanto) No, nada pasó, pero tú y yo, terminamos. Puedes volver a tu vida de antes, esa vida sin hijas, ni mujer que te jodan la existencia...
BAUTISTA: Pero, ¿por qué? No, nada de eso, tú y yo no terminamos, no vas a volver a tomar decisiones por los dos, no me da la gana, ¿me escuchas?
MARU: (Le da una bofetada) Si tanto odias esta vida, ¡te hubieras largado a tiempo! ¡Vete de nuevo! ¡Retoma tu vida de aventuras, sin obligaciones! Al menos, hubieras tenido los cojones de decirme las cosas de frente y me ahorrabas este momento de mierda y por cierto, "tu primito", fue quien me salvó la vida, porque él me sacó del agua, inconsciente y me revivió... No te quiero volver a tener cerca, Bautista (Le revolea su anillo de bodas) Olvídate que tienes mujer e hijas...
BAUTISTA: Pero, ¿qué carajos te pasa? Yo no odio mi vida, ¿de dónde sacas eso? Antes de pegarme y mandarme al diablo, ¡explícame las cosas! Porque no lo entiendo, no entiendo nada...
MARU: Grábate cuando duermes y así escuchas lo que dices... (Se va a su cuarto y comienza a empacar, mientras llama a su hermano)
BAUTISTA: (Va con ella, le quita el teléfono y saca la ropa de la maleta) No vas a ir a ningún sitio hasta que me expliques bien las cosas, porque no pienso permitir que te largues y que ni siquiera me des la chance de defenderme de lo que tú crees que siento, dime lo que dije durmiendo, repítemelo...
MARU: (Se lo saca de encima) ¡Sabes muy bien lo que sientes! (Retoma lo que hacía) ¿Julián, conseguiste el avión sanitario? Mándalo ya al aeropuerto de Málaga, viajamos esta misma noche. Adiós
BAUTISTA: Si se muy bien lo que siento, la que no lo sabe, eres tú. Como siempre, soy el imbécil que tiene que acatar tus órdenes y que no se puede defender de nada, porque ni siquiera me dices qué coño escuchaste para que me digas esto
MARU: ¡Has lo que carajo quieras, Bautista! A mí no me debes ningún tipo de obediencia... (Lo mira) Y yo defendiéndote como una idiota, como unas estúpida, gritando al mundo que eras el mejor de los hombres y que no merecía semejante bendición... ¡Qué idiota fui!
BAUTISTA: Joder, Maru, deja tu carácter de mierda a un lado, por una puta vez y dime qué coño escuchaste, porque pudiste haber interpretado mal mis palabras

6 comentarios:

  1. ¡¡NO PUEDE SER!! Jajajajajajajaja ¡Cristo bendito! ¿Que locura es esto? xd

    ResponderEliminar
  2. Que paso aca? esta todo para atras... que pasara? hayyyyyyyyyyyyy que desesperación que se arregle todo yaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

    ResponderEliminar
  3. Párese que fue la noche de las locuras todos terminaron peliando

    ResponderEliminar
  4. Jajjajajajaja Cristo crucificado y resucitado al tercer día, jajajajajaja estos si que están bien locos, Maru y Bau...

    ResponderEliminar
  5. Hijoleeee!!!! Se armo la grandeee!!! Que cosas cheeee excelente capitulooo!!! Me encantoo jajajajaja :D

    ResponderEliminar
  6. bueno y q paso con esta familia bipolar todo caray

    ResponderEliminar