Capítulo 195

Alejandro tenía a Daniela abrazada y le pasaba las manos por la espalda, masajeando un poco y friccionando para darle calor.

ALEX: Se siente muy bien, ¿eh? ¿O prefieres así? (Le roza el vientre y entre los senos)

DANI: (Sonríe) Eres un mano suelta, esposito (Se gira y lo besa)

ALEX: ¿Te gusta que sea mano suelta o mantenemos lo de "no sexo"?

DANI: Me encanta que seas mano suelta, pero eso no implica sexo...

ALEX: Tienes razón, podemos sólo jugar, ¿verdad?

DANI: Exacto...

ALEX: Juguemos, pues... (Baja su mano hasta la parte baja del vientre de Dani, apenas tocando con las yemas de sus dedos y le besa el cuello)

DANI: (Gime) Dios, mira lo que haces con sólo rozarme...

ALEX: (Hace que sus dedos desciendan un poco más) Tú ni me tocas y no sabes cómo estoy, Dani. Sólo te recuerdo y ya me enloqueces...

DANI: ¿Y si te digo que no puedo jugar?

ALEX: (La deja) No jugamos, amor, sabes que no te presionaría para que hagas algo que no quieres...

DANI: No me entendiste, amor...

ALEX: (La mira) ¿Qué no entendí?

DANI: Que no puedo jugar, porque me muero por hacerte el amor...

ALEX: ¿Qué te está deteniendo, Cosita? Has de mí, lo que quieras... Es tu bote, es tu noche y yo soy tu hombre, para lo que desees...

DANI: Lo se, pero habíamos quedado en nada de sexo...

ALEX: Es cierto, nada de sexo, pero me dijiste que querías hacer el amor...

DANI: Es casi lo mismo, cariñito...

ALEX: Está bien, amor, si tú lo dices, no hacemos el amor y nos quedamos los dos cachondos y alborotados...

DANI: Es mejor, ya entenderás el por qué mañana (Sonríe)

Alex le devuelve la sonrisa, le da un besote a Dani y se levanta. Busca su ropa interior y aunque estaba húmeda, se la pone y el pantalón también. Se queda afuera, pensativo...

DANI: (Sale detrás de él, lo abraza por la espalda) ¿En qué piensas?

ALEX: (La jala y la sienta en su regazo) En ti, en lo difícil que me resulta, a veces, descifrarte, comprender esos cambios que tienes

DANI: ¿Qué cambios? Muero por hacerte el amor, pero se que si lo posponemos, cuando lo hagamos, vamos a disfrutar más...

ALEX: No me refiero a eso solo... A ver, Cosita... Hace un rato, si no me detenía yo, lo hubiéramos hecho, ¿no? ¿Sabes por qué te propuse eso de no tener sexo?

DANI: No, no lo se, ¿me lo vas a decir?

ALEX: Claro. Quería ver cómo lo manejabas. Por momentos pienso que si no te busco, te quedas con las ganas y no sólo con el sexo, sino con todo. Es como que esperas a ver qué quiero hacer yo, o dónde quiero ir o qué se me antoja y no me gusta eso

DANI: Sólo quiero complacerte, amor, pero cuando no me gusta algo, te lo digo....

ALEX: No siempre y a mí no me interesa hacer lo que quiera yo, me importa hacer lo que los dos disfrutemos, deseemos, Dani. Sobre todos cuando estamos a solas, que no es muy a menudo. Con los niños, pues, se hace lo que ellos mandan, pero en estas escasas ocasiones de intimidad que tenemos, lo ideal sería hacer lo que sentimos los dos, ¿no?

DANI: Tienes razón...

ALEX: ¿Quieres volver a casa?

DANI: No, quiero estar aquí contigo...

ALEX: ¿Te apetece un café? Lo hizo mi mamá (Le levanta las cejas una y otra vez)

DANI: ¡¡Jajajaja!! Si, gracias...

ALEX: (Le da un besote y busca un termo que tenía con café y dos tazas. Sirve y vuelve con Dani, abrazándola por detrás) Toma, Cosita... Aunque no creas y aunque no hagamos el amor, esta noche es soñada, maravillosa. Tú, el mar y yo...

DANI: Lo se y te creo (Sonríe) Jana me dijo hace unos días, que había escogido al mejor papá del mundo y me dio las gracias...

ALEX: ¿Eso dijo? (Hace un gesto de corazón estrujado) Es mi princesita... (Bebe un poco de café) Mmmm... ¡Sabe espectacular! Si estamos en plan de confesiones, debo decirte que Gabriel me dijo que él jamás quiere otra mamá, la única eres tú y que eres la más linda del mundo, hasta enojada... (Sonríe) Cosa que es completamente cierta, Daniela Victoria. Nunca un ceño fruncido fue tan tentador

DANI: Jajajaja, tengo cautivados a los Zavala, jajajaja

ALEX: ¡¡Embrujados, más bien!! Aguarda, tenme esto, amor... (Le da la taza con café, se levanta, trae los almohadones y el cobertor de la cama. Se reacomodan) Mmm....

DANI: Se está muy bien, aquí, ¿no crees?

ALEX: Ajá, se está mejor que en el cielo....

DANI: Ajá (Lo besa) Te amo, Cosito...

ALEX: (Se deja besar) Te amo, Dani...

Samanta esperaba a Andrés en el bar. El abogado estaba un poco demorado porque un caso en el que trabajaba, se había complicado más de lo usual y llegaría tarde. Sam lo sabía, pero de todos modos, decidió ir al sitio del encuentro y distraerse un poco con algunos conocidos que siempre asistían a aquel lugar.

Cuando Jerónimo la vio, se le acercó tranquilamente, como si nunca hubiera pasado nada. Le tocó el hombro y le habló al oído como lo hacía antes, en la época en que estaban juntos...

JERÓNIMO: ¿A ti no te pasa el tiempo, amor?

SAM: (Se gira) Hola, Jero...

JERÓNIMO: (Le da un beso mitad en la mejilla, mitad en la boca) ¡Mucho tiempo sin verte, preciosa!

SAM: Si, desde que te encontré, en nuestra cama, con aquella tipita...

JERÓNIMO: No se te olvida, ¿eh?

SAM: ¿Cómo olvidarlo?

JERÓNIMO: Fue un error estúpido, Sam, una cuestión de hombría que en aquel momento parecía importante, pero no lo fue.

SAM: ¿Cuánto hace que te dejó la tipita?

JERÓNIMO: No me dejó, después que nos descubriste, salí detrás de ti y no se, no la volví a ver

SAM: Yo no te vi llamándome, ni insistiéndome. No me mientas, Jerónimo...

JERÓNIMO: No te miento, Sam. Te llamé y te busqué, pero no respondías y entendí que necesitabas tiempo. El problema fue que cuando volví a tratar de dar contigo, ya no estabas en Madrid, ya te habías vuelto a la isla y si, me tomó un tiempo, pero te encontré. ¿No se te hace raro que yo esté aquí, amor? Sammy, sabes que no volvería aquí por nada más que por ti

SAM: ¿Cómo sabías que estaba aquí?

JERÓNIMO: Fui averiguando de un conocido a otro, hasta que supe que te transfirieron. Si que me costó, pero di contigo. Igual, lo de esta noche, es fortuito. Estoy esperando a mi primo, ¿recuerdas a Iván? No sabía que ibas a estar en este bar. Nadie me dice dónde vives.

SAM: Nadie lo sabe...

JERÓNIMO: ¿Y a qué se debe el secreto? ¿No quieres que te encuentren?

SAM: Puede ser...

JERÓNIMO: (Sin previo aviso, la coge de la cintura y la besa) Pero te encontré...

SAM: ¿Qué haces? Ni se te ocurra volver a hacerlo...

JERÓNIMO: ¿Por qué no? (La vuelve a besar, pero Sam se zafa) ¿Qué te pasa?

SAM: Lo nuestro se acabó, Jerónimo, entiéndelo... ¿Qué te crees? ¿Qué estaba esperando a que vinieras a buscarme? No es así, hay una persona en mi vida y no quiero perderle...

JERÓNIMO: ¿Estás de novia? No, Sam, tú me amabas con locura, no pudiste dejar de amarme. Algo tiene que quedar de eso

SAM: No queda nada, hace más de dos años de eso, Jerónimo, despierta, no soy tuya, ni voy a serlo...

JERÓNIMO: No te creo... (Vuelve a besarla y alguien interrumpe)

ANDRÉS: Lo siento, pero necesito darle esto a la señorita... (Le da las llaves del departamento) Hasta nunca, Samanta...

SAM: ¿Qué pasa? Andy, ¿qué esto?

ANDRÉS: Que se terminó, Samanta, eso es... (Mira a Jerónimo y se va)

SAM: (Va detrás de Andrés) Dime que pasó, no entiendo nada...

ANDRÉS: No entiendes nada... Ve a besarlo un poco más, quizás eso aclare tu cabecita

SAM: Yo no besé a nadie...

ANDRÉS: ¡No me quieras tomar por estúpido! Te vi, las tres veces...

SAM: Las tres veces me besó él y las tres veces, lo aparte de mí, ¿eso no lo viste?

ANDRÉS: ¡Por favor! No me vengas con ese cuento, ¿quieres? Vete con él, bésalo y que te bese hasta el hartazgo... ¿Para eso aceptaste estar conmigo? ¿Para hacerme lo que yo le hice a otras mujeres? (La aplaude) ¡¡Te felicito, muy bien hecho!! ¡Señoras y señores, conozcan a Samanta Ocampo, la vengadora feminista! Vete, te están esperando

SAM: ¿De verdad me crees capaz de hacerte algo tan sucio?

ANDRÉS: No importa si lo creo o no lo creo, ¡LO HICISTE!

SAM: No hice nada, Andrés, él estaba cerrando el pasado y no besé a nadie, nunca te haría eso y menos después de estos años, mi amor, créeme...

ANDRÉS: Si fuera al revés, si una tipa me besara a mí, ¿qué harías tú? Nada, Samanta, ni estarías escuchando lo que pudiera decirte. (Ve a Jerónimo que está a la expectativa) Te esperan, yo no tengo nada que hacer aquí... (Da la vuelta y sale del bar)

SAM: (Sale del bar) ¿Te vas a creer lo que no es? ¿No me vas a dar ni el beneficio de la duda? ¿No me merezco ni eso?

ANDRÉS: ¡¡TE ESTABAS BESANDO CON OTRO TIPO!! En mi lugar, tú, ya hasta te habrías ido de la casa, que es lo que voy a hacer en este preciso momento. ¡Vuelve con ese imbécil! ¡¡El cornudo se va!! (Se mete a su auto y arranca)

SAM: (Ella se sube en el suyo y lo sigue) Jerónimo, esta me las pagas....

ANDRÉS: (Llega al departamento y se da cuenta que no tiene las llaves) ¡¡Carajo!!

SAM: (Llegó también y vio a Andrés en la puerta. Va hasta él) ¿Te abro?

ANDRÉS: ¿Desde cuándo andas con ese tipo, eh?

SAM: ¿De qué hablas? Yo no estoy con Jerónimo...

ANDRÉS: (Le cambia el rostro) ¿¿Jerónimo?? ¿¿Tu ex, Jerónimo?? ¿¿Con ese tipo te besabas así??

SAM: Si, era él, pero yo no lo besé, fue él a mí y yo lo separé en las tres ocasiones. Sólo te quiero a ti, mi amor...

ANDRÉS: ¡Sam, por Dios! (Entran y va al cuarto a hacer su maleta)

SAM: Te lo juro por mi mamá, amor, créeme, no tengo nada que ver con él... (Se pone delante para que deje de hacer la maleta) Mírame a los ojos y dime lo que ves...

ANDRÉS: (Se le empiezan a caer las lágrimas que se venía aguantando) Pero lo estabas besando y no me salgas con que él te besó porque para un beso, se necesitan dos bocas y para tres besos, ni hablar...

SAM: Y las tres veces, lo aparté. (Se acerca) Llevamos un año juntos, amor ¿todavía no me conoces?

ANDRÉS: Si no hubieras querido, te hubieras largado de ahí. A ver, si el caso hubiese sido a la inversa, ¿dónde estaríamos en este momento? Y llevamos juntos un año y medio, ¡entérate!

SAM: Llevamos juntos un año, seis meses y tres semanas, lo tengo bien claro y no te dejaría, ni aunque me muriera (Empieza a llorar, se había contenido hasta ahora, para poder hablar)

ANDRÉS: ¿El cornudo soy yo y lloras tú? Contesta, Samanta, de ser a la inversa, ¿dónde estarías ahora?

SAM: No estaría aquí y lloro porque se que estoy perdiendo al amor de mi vida, por un imbécil del pasado...

ANDRÉS: Pues, así está la cosa, Samanta. El cornudo, se va. Vuelve con Jerónimo y deja el teatrito

SAM: Tú no te vas a ningún lado, este es tu departamento y no voy a volver con Jerónimo, porque es a ti a quien amo, aunque no lo creas... (Le saca toda la ropa de la maleta) Si alguien se tiene que ir soy yo, no tú...

ANDRÉS: Esta es tu casa. (La detiene) ¿Por qué no te fuiste a la primera? ¿Por qué seguiste hablando con él, eh? ¿POR QUÉ, SAM?