Maru salió a la puerta y Bautista
la alcanzó
BAUTISTA: He dicho que me voy yo,
no me discutas en esto también, por favor...
MARU: (Estaban en la calle y
Lucía se despierta, llorando) Ya, mi amor, tranquila... (La carga)
BAUTISTA: Entra en la casa, por
lo que más quieras…
MARU: No hay casa... (La niña no
se calmaba) Hijita, no llores así...
BAUTISTA: Si hay casa, esa es tu
casa (La carga y la entra) Esta es tu casa (Sale por el carrito y lo entra)
Aquí se quedan las dos (Se gira y se va dando un portazo)
MARU: (Lo llama) Atiende, porque
te la corto
BAUTISTA: ¿Qué quieres? ¿No me
querías lejos? Ya lo estoy, ¿por qué me llamas?
MARU: No quiero estar aquí, si tú
no estás, por eso me iba a ir. Si no vuelves, me largo yo también
BAUTISTA: (Llega a su casa, coge
a su esposa de la cintura y la besa) ¿Me querías aquí? Aquí me tienes...
MARU: Cuidado con la niña...
BAUTISTA: ¿Qué pasa con Lucía?
MARU: Que me estrujaste a mí y
por poco la estrujas a ella, apenas se pudo dormir... (La deja en su coche) No
me preguntes qué me pasa, porque no lo se. Por momentos te amo más que a mi
vida y en otros, desearía no haberte conocido nunca
BAUTISTA: Pase lo que pase, aquí
voy a estar. Me da igual las veces que me eches de tu lado, lo que me importa
saber, es que te amo más que a mi vida...
MARU: Odio sentirme así, no lo
entiendo y no lo puedo controlar tampoco... (Coge a la pequeña) Voy a
recostarla en su cuna y de paso, me recuesto yo
BAUTISTA: (La besa) Ve, yo me
quedo aquí, para lo que necesites (La vuelve a besar) Descansa, Chocolatita, te
amo... (Le da otro beso y se sienta en el sillón)
MARU: Recuerda que tenemos el
partido de Gabriel (Se va)
BAUTISTA: Lo recuerdo...
Con los ánimos más calmados y
después de haber dejado a Martina en casa de Carmen y Eduardo, Tincho y Tami
salieron a hacer unas compras. Hubieran querido llevar a la niña, pero estaba
muy fresco y podría llover, así que prefirieron no correr riesgos. Se detuvieron
en el escaparate de una tienda de ropa para bebés...
MARTÍN: ¿Algo que le quieras
comprar al nuevo bebé Zavala?
TAMI: No, ya les tengo el regalo
perfecto...
MARTÍN: (Le da un pico) ¿Qué
tienes en mente? Cuéntame...
TAMI: Sorpresa, señor… Quiero ver
algo de aquí
MARTÍN: Ve tranquila, te espero. Voy a ver algunas cosas en aquel local.
MARTÍN: Ve tranquila, te espero. Voy a ver algunas cosas en aquel local.
TAMI: Vale, te amo... (Lo besa y
entra en la tienda)
MARTÍN: (Se acerca tranquilamente
a la vidriera) ¿Me gustaba algo de todo esto?
JESSICA: (Lo mira) ¿Esteban?
(Martín no asumió que lo llamaran a él) ¿¿ESTEBAN??
MARTÍN: (Se gira por curiosidad y
se le congela la sangre) ¿Jessica?
JESSICA: Hola, mi amor (Lo abraza
y lo besa) Te extrañé...
MARTÍN: (Se suelta) No, no, no
hagas eso... (Pone distancia)
JESSICA: ¿Por qué, mi amor? No me
rechaces. Te busqué por todos lados...
MARTÍN: Es que las cosas
cambiaron y no me digas "mi amor". Nosotros no fuimos nada, Jessica,
fueron sólo algunos besos y tú sabías cuál era mi situación...
JESSICA: Si, pero no sólo fueron
besos...
MARTÍN: Eso no cuenta, nada de lo
que pasó cuenta. Mira, estoy casado y tengo una hija hermosa. Las amo más que a
mi vida, lo siento, pero es la verdad
JESSICA: (Se queda helada) ¿Estás
casado? No me mientas (Lo besa) Se que no era sólo una aventura (Lo vuelve a
besar) Se que me quieres... (No lo soltaba y seguía besándolo)
TAMI: Buenas tardes...
MARTÍN: Estoy casado y con ella,
Jessica... Ella es la "Mocosa", la de mi anillo...
JESSICA: ¿Qué Mocosa? ¿Por qué me
hiciste el amor, sabiendo que ella existía?
TAMI: (Lo mira) No te preocupes,
él no sabía nada de mí, ni sabe nada de mí. Disfrútalo... (Se va)
MARTÍN: ¡Tami! (Va tras ella)
¡¡Espera!! Yo no sabía de ti y ella me dijo que estábamos juntos...
TAMI: No quiero oír nada, vete
con ella, Martín...
MARTÍN: No tengo nada que hacer
con ella, mi esposa y a quien amo eres tú
TAMI: Yo no soy nada en tu vida,
Esteban...
MARTÍN: (La detiene) Lo eres
todo, Tamara, ya... Me desperté en ese sitio y todos me llamaban Esteban.
Apareció esta mujer y dijo que era su pareja y todo mundo lo confirmaba. ¿Por
qué iba a sospechar? No lo supe entonces, pero lo se ahora, soy Martín, tu
hombre y eso quiero ser hasta el último día de mi existencia
TAMI: (Lo mira) ¿Quién me asegura
eso?
MARTÍN: Nadie. Pero es lo que
siento.
TAMI: Me sientes, pero no me
recuerdas...
MARTÍN: No completamente, pero
recuerdo algunas cosas. Tami, mi amor, yo no busqué nada de lo que pasó, pero
pasó y no hay modo de cambiarlo. Sólo quiero poder ser feliz contigo y con
Martina, nada más.
TAMI: Y yo quiero estar en paz
(Se marea un poco y se sienta)
MARTÍN: (La agarra) ¿Estás bien?
Te pusiste pálida, mi amor. Vamos a casa
TAMI: No, espera, deja que se me
pase...
MARTÍN: ¿Quieres agua? Ahí hay
una tienda, te traigo lo que me pidas
TAMI: No, sólo necesito un poco
de tranquilidad
MARTÍN: Está bien, Mocosa, me
siento aquí y cuando quieras ir, me avisas...
JESSICA: Esteban, mi amor, ¿por
qué me dejaste hablando sola?
MARTÍN: ¡No soy tu amor! ¡Me
mentiste! Cuando desperté en ese lugar, me dijiste que eras mi mujer y que
llevábamos mucho tiempo juntos y eso es toda mentira.
JESSICA: No lo hice por mal, no
quería que sufrieras...
MARTÍN: Debiste decirme la
verdad. Tengo una esposa y una hija, Jessica y con tu mentira, me impediste
salir a buscar mi verdad, la de ellas. Y no soy Esteban, me llamo Martín. Vete,
déjame en paz, no vuelvas por aquí
JESSICA: No me eches de tu vida
por un error...
TAMI: (Se levanta) ¿No escuchas?
¡Qué te largues! Mi esposo no quiere nada que ver contigo...
MARTÍN: No te echo de mi vida por
un error, no quiero nada contigo porque amo a Tamara, a mi esposa y es ella a
quien deseo tener a mi lado. Te agradezco tus cuidados, eso no te lo puedo
negar, me salvaste la vida, pero de aquí en más, tú por tu lado y yo, por el
mío, con mi mujer y mi hija, que son todo lo que me importa
JESSICA: No me puedes cambiar por
esta niñita, ella no puede ser tu esposa... ¿Cuántos años tienes? ¿17?
MARTÍN: (Retiene a Tami) No te
rebajes y vete, no vuelvas a buscarme... (Coge la mano de su Mocosa ¿Vamos a
casa, amor?
TAMI: Vamos, mi amor...
JESSICA: (Los dos comienzan a
caminar, dándole la espalda) Pues, a mí, puedes negarme, pero a tu hijo, no...
MARTÍN: (Se detiene y se gira)
¿Hijo?
JESSICA: Si, a tu hijo...
MARTÍN: ¿De qué hablas? Yo sólo
tengo una hija
JESSICA: No, Esteban, cuando
hicimos el amor, no nos cuidamos...
MARTÍN: ¿Me estás diciendo que
estás embarazada?
JESSICA: Si...
MARTÍN: (Se empieza a reír, más
por nervios que otra cosa) Esto es una locura, Jessica... Sólo lo hicimos una
vez y ni siquiera recuerdo cómo fue...
JESSICA: Pues eso díselo a
nuestro bebé, por eso te busqué como loca cuando te fuiste, para contártelo...
MARTÍN: Cuando confirme que hay
un bebé y que es mío, hablamos. Si fuiste capaz de mentirme sobre mi identidad,
bien podrías mentir en esto, ¿no?
JESSICA: Cuando quieras vamos al
doctor... Vamos a tener un bebé, mi amor...
MARTÍN: ¡NO ME DIGAS MI AMOR! El
único amor aquí, es el que siento por mi esposa... (Mira a Tami y se acerca un
poco a Jessica) Dame tu número de celular y arreglamos una cita con el médico,
pero hasta que eso no sea una verdad absoluta, no te voy a creer una palabra...
JESSICA: Toma (Le apunta un
número y se lo da) Llámame... (Lo besa en los labios y se va)
MARTÍN: (No quería ni mirar a su
esposa) No se qué decirte, Tamara
TAMI: No digas nada... (Se
adelanta)
Martín sigue a Tami y se van en silencio...
En casa de Maru, las cosas
mejoraban un poco. Ella se despertó y checó a Lucía, que seguía dormida. Salió
del cuarto y vio a Titán que dormitaba en el sillón.
MARU: (Acariciándolo apenas) ¿Por
qué no vas a la cama, Bau? Si te duermes ahí, después no vas a aguantar el
dolor de cuello...
BAUTISTA: No, aquí estoy bien...
MARU: Mentiroso, no estás bien,
mírate cómo haces muecas de estar incómodo... Anda, ve a la cama y duerme bien
BAUTISTA: Ya me acomodo bien (Se
recuesta bien) ¿Ves? Así estoy bien...
MARU: ¿No quieres ir a la cama o
qué?
BAUTISTA: No quiero molestarte,
ve a descansar tú...
MARU: ¡Cómo quieras, pues! Al
final, la única a la que le faltan los tornillos, no soy yo, eh...
BAUTISTA: Mmmm, si... (La
recuesta con él) ¿No quieres dormir un ratito conmigo?
MARU: ¿Tan apretados? ¡Me tienes
que poner encima tuyo o ponerte tú encima mío, Bauti! De otro modo, no vamos a
entrar...
BAUTISTA: (La acomoda y la
recuesta encima) Así, si cabemos...
MARU: Ya veo... (Quedan a tiro de
un beso)
BAUTISTA: ¿Te quedas así,
conmigo, un ratito?
MARU: ¿Así? (Le da un beso en la
mejilla)
BAUTISTA: Si, así o como sea,
sólo quiero dormir contigo...
MARU: (Se levanta) Lo siento, no
puedo... (Se va a la cocina)
BAUTISTA: (Se levanta y va con
ella) No te preocupes (Le da un beso en la mejilla) ¿Dormiste bien?
MARU: (Se separa de él) No, dormí
muy mal, como cada vez que tengo que dormir sola
BAUTISTA: (Se acerca) ¿Entonces
qué hacemos para que duermas bien?
MARU: Separarnos, Bautista. Yo no
puedo ser la mujer que tú necesitas y no quiero que sigas atado al desastre en
el que me estoy convirtiendo
BAUTISTA: ¿Por qué no me dejas
dormir contigo, abrazados? Sólo dormir, no te pido nada más, por favor (Se
acerca más) Déjame dormir contigo...
MARU: Porque no es lo que deseas,
¿crees que no me doy cuenta de lo que te cuesta contenerte?
BAUTISTA: Se que lo sabes, pero
ahora lo único que quiero es dormir contigo (Se pone de rodillas para quedar a
la altura del vientre y lo besa) Déjame dormir contigo, mi amor...
MARU: No hagas eso, Bautista, por
favor. Tú no mereces esto, mereces alguien que te ame y que merezca tu amor...
Estoy rematadamente loca, pues... Y esa que apareció con un crío de Martín, ¡¡MÁTENLAAAAAAAA!!
ResponderEliminarNo no puede ser q esa mujer este pero no d martin porfavor, no puedo verlo compartir con nadie mas q con sus amores q son tamy y martina y el otro q viene pero d tammy por su puesto, esa nueva mujer q aparecio no es buena y eso no se vale
ResponderEliminarHijoleeee ya le cayo el cuaartooo sargento al arroz q apenas volvia a cocinarseee!!! Maten a jessicaaa!!! Tamy y martin tienen q estar bien nose vale confio en q todo se solucione excelente e intrigante cap como siempre!! :D
ResponderEliminarahora si que se le pusieron los huevos a peseta al martin, por descocado le va a indilgal renacuajo ajeno yo creo que tami estaba major sin el....
ResponderEliminarNo pues esta pareja quedo para el colmo, (TyT) sino es paro. sino es por celos, es por falta de memoria, y ahora que apareció esa fulana... Que cosas con Maru... Dios las hormonas al mil!!!
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