Capítulo 246

Pasó una semana desde la cirugía de Alex y por fin, él pudo volver a su casa. Allí lo esperaban todos, pero por órdenes de Buenfuente, el señor tenía que hacer reposo y estar tranquilo, así que los invitados se retiraron pronto, dejando sólo a la familia.

Josefina Deluca, fue amiga de Angélica, la madre de Dani, desde que las dos eran niñas. Estudiaron juntas, vivieron muchas cosas y su amistad perduró en el tiempo. Incluso después de la muerte de Angélica, Josefina ayudó siempre a Alberto con los niños y era como otra mamá para los tres. La señora Deluca, se había casado joven y enviudó a los pocos años. Tenía un hijo de la misma edad de Daniela, que vivía en Portugal y venía a visitarla una vez cada dos meses. El muchacho se llamaba igual que su papá, Román.

A causa de sus muchas responsabilidades, Daniela y Alex se plantearon buscar ayuda para la casa y los niños y mejor opción que Josefina, no iban a encontrar. Por lo mismo, aquella tarde, la del regreso de Alex, la mujer se quedó con ellos y se instaló en la casa, ya era una más de la familia.

ALEX: (En su cama, hablando con Josefina) No dejes que Dani haga esfuerzos. Ese renacuajo que tenemos por hijo quiere que juegue como siempre, pero ahora está embarazada y hay cosas que Daniela no puede hacer. Si se lo digo yo, se enoja, pero si se lo dices tú, puede que te haga caso...

JOSEFINA: No se preocupe, Alejandro, se cómo tratar con esa niña alocada... (Sonríe) Lo importante es que usted se ponga bien...

ALEX: ¿Nunca vas a dejar de tratarme de "usted”? Eres como mi suegra, pues y yo me voy a poner bien en menos de lo que creen, ganas de vivir, me sobran...

JOSEFINA: Algún día le quitaré el "usted" (Sonríe) Y no hace falta que lo diga, se le notan las ganas de vivir, sobre todo cuando mira a mi muchacha...

ALEX: (Suspira) Ahhh, su muchacha... Daniela es mi amor, la madre de mis hijos, claro que me da toda la fuerza que necesito... (Le toma la mano) Por favor, has que entienda que tiene que tener cuidado.

JOSEFINA: No se preocupe, yo me encargo...

ALEX: Gracias, suegrita... (Entra Gabo, salvaje como siempre)

GABO: ¡¡PAPIIII!! ¿Vemos el partido aquí? (Saluda a Josefina) ¡Hola, Finita!

JOSEFINA: Gabriel, ten cuidado con tu papá...

GABO: (Le da un beso) Si, Finita... Papi, ¿me dejas ver tu cicatriz de nuevo?

ALEX: ¿Otra vez, Gabriel?

GABO: ¡¡¡Siii!!!

ALEX: (Le muestra) ¿Contento?

GABO: ¡¡Siiii!! Las mías son pequeñas...

ALEX: Porque tú eres un pequeño salvaje, que se hace heridas acordes a su tamaño...

GABO: Finita, ¿nos vas a hacer pastel? Ayer nos dijiste a Jana y a mí que si lo harías...

ALEX: ¿Pastel? No seas tan pedigüeño, hijo...

JOSEFINA: Claro que si, mi niño, pero antes, ya sabes lo que tienen que hacer Jana y tú...

GABO: ¡Si! (Sale corriendo)

ALEX: ¿Qué tienen que hacer?

JOSEFINA: Ordenar los juguetes, hacer sus camas y no molestarte mientras descansas...

ALEX: Jajajaja, ¿y todo lo hacen por un pastel? (Le besa la mano) Gracias por estar aquí, eres muy importante para nosotros, sobre todo para Dani, ella te adora

JOSEFINA: Y yo la adoro a ella, es tan parecida a su mamá... (Suspiró con nostalgia)

ALEX: Eso dicen y debió ser una gran mujer, si crió a tres personas como mi mujer y mis cuñados, tuvo que serlo. Alberto y ella hicieron un excelente trabajo y con tu ayuda también... (La nota rara) ¿Estás bien?

JOSEFINA: A veces echo mucho de menos a mi amiga, eso es todo y yo no tuve nada que ver en cómo son esos muchachos ahora, todo eso es mérito de Beto...

ALEX: ¿Beto? Jajajaja, llego a decirle así a mi suegro y Dani queda viuda, jajajaja y si tuviste que ver, los tres te sienten muy cercana. Te adoran, Josefina, no eches en saco roto lo que has hecho por ellos

JOSEFINA: Lo se y yo también los adoro, pero el trabajo ya estaba hecho cuando Angie murió, era muy buena madre, una de las mejores (Sonríe) Bueno, es mejor que me vaya a hacer el pastel, porque si no, los pequeños me van a volver loca...

ALEX: Mis hijos tienen esa virtud, jajajaja, ve tranquila y lamento en el alma no poder probar tu pastel

JOSEFINA: Ya tendrá tiempo de hacerlo... Que descanse... (Sonríe y sale)

ALEX: (Se sienta en la cama y prende la televisión) ¿Qué partido quiere ver el renacuajo?

DANI: (Entrando en la habitación) El del Barça, por la champions...

ALEX: (Le abre los brazos) ¿Quieres venir?

DANI: (Se acerca a él y se sienta a su lado, después de besarlo) ¿Ya pasó por aquí el terremoto?

ALEX: (Asiente) Y como quería pastel de Josefina, se fue a ordenar su cuarto y el de Jana, creo que lo hacen entre los dos... (Besote) ¿Estás mejor? Toda la semana te has sentido mal por aquella pesadilla...

DANI: Si, ya estoy mejor... (Sonríe) Te amo (Lo besa) No lo olvides nunca...

ALEX: No lo olvido, Cosita... (La envuelve en sus brazos y la recuesta en su regazo) Vivo por ese amor, hermosa... (La besa mucho)

DANI: Ten cuidado, te vas a lastimar, amor... (Se aparta un poco)

ALEX: Estoy bien, Dani, no te apartes

DANI: Es que tengo miedo que te lastimes...

ALEX: No me pasa nada, ¿no me ves?

DANI: Si, te veo, pero no puedo evitar pensar que te puedo hacer daño...

ALEX: ¿Tú? ¿Hacerme daño? Si por ti vivo, bobita... ¿Me besas, por favor?

DANI: Te amo (Lo besa) Y me refiero a daño físico, bebé... (Lo vuelve a besar)

ALEX: Estoy perfectamente, preciosa y si me besas, me siento mucho mejor

DANI: Entonces, no voy a dejar de besarte...

ALEX: No lo hagas, amor... (Siguieron besándose hasta que Gabo volvió a entrar)

GABO: ¡Deja a mi mamá, pastoso!

DANI: ¿Pastoso? ¿Qué es esa palabra, Gabriel?

GABO: Así dice Ari, mami... (Se pone entre sus papás)

ALEX: ¿Qué pasa, hijo?

GABO: Nada... (Abraza a Dani por el cuello) No me gusta que la beses, es mía...

DANI: Jajajaja (Mira a su esposo, riendo) Soy suya...

ALEX: Pero es mi esposa, Gabo, no puedes ponerte así

GABO: (Se puso serio) No me importa, mamá es mía, no quiero que la beses...

DANI: Y si soy yo la que lo besa a él, ¿qué pasa?

GABO: Tampoco...

ALEX: Gabo, ¿qué pasa?

GABO: Nada

ALEX: Hijo, los esposos se besan, es lo normal

GABO: Pero ella es mi mamá, no quiero que la beses nunca más...

DANI: (Seria) ¿Qué te pasa, mi amor? Que bese a tu papá, no quita que te quiera, ¿por qué no quieres que me bese?

GABO: ¿Tú lo quieres más a él que a mí? (Se separa) ¡Es eso! Como no estuve en tu panza, lo quieres más a él y a Jana y al bebé y a mí no me quieres más... (Se va, enojado)

DANI: Voy con él (Besa a Alex y sale detrás del niño) Espera, Gabriel, no te vayas así (Lo alcanza y lo alza) ¿Quién te dijo que no te quiero?

GABO: (Estaba llorando) No quiero hablar contigo

DANI: (Le seca las lágrimas) Pero yo si. Lo que no quiero es que pienses cosas que no son. Yo te amo, Gabriel, no puedes pensar que quiero más a tu papá o a Jana, los amo a los tres por igual, con el mismo amor

GABO: Pero ya no estás conmigo como antes, ahora siempre estás con papá. No me pelas, mami y eso es porque ya no me quieres

DANI: No, Gabriel, no vuelvas a decir eso nunca más. Yo no he dejado de quererte desde el día que nos conocimos. Tu papá, Jana y tú, son lo más importante en mi vida y si ahora estoy más con tu papá, es porque está malito, no porque lo quiera más a él, ¿me entiendes?

GABO: ¿Y al bebé? ¿No lo amas más que a mí?

DANI: Al bebé lo voy a amar igual que a ti, porque los dos son mis hijos, aunque a ti no te hubiera llevado dentro de mi panza, te amo como si te hubiera tenido aquí... (Se puso la mano en la barriga)

GABO: (La abraza) ¿Me lo juras?

DANI: Te lo juro (Le sonrió y le dio un beso) Recuerda, tú y yo siempre unidos, mi príncipe (Le da otro beso) ¿Vamos por Jana y vemos el partido los cuatro juntos en mi cuarto?

GABO: (La tenía agarrada fuerte) Nunca dejes de ser mi mami, yo te amo

DANI: Nunca voy a dejar de ser tu mamá (Lo mira) Tú nunca dejes de ser mi hijo…

GABO: Nunca, nunca, promesa de hombre macho

DANI: Promesa de mamá (Le da un beso) Ve al cuarto en lo que yo busco a Jana, ¿si?

GABO: Si, mami, voy con el pastoso, jajajaja

DANI: Jajajaja, no le digas así...

GABO: (Dani lo baja) Pero es un pastoso, mami, eso dice Ari... (Va al cuarto de sus padres)

ALEX: ¿Y, renacuajo? ¿Me dices qué pasa?

GABO: Nada, pastoso, ya está todo solucionado. Te doy permiso de besar a mi mamá, pero no te pases...

ALEX: (Lo jala con él) ¿Me das permiso? ¿Si? Pues, yo te permito que seas un buen hijo y la cuides siempre. A ella, a Jana y al bebé. Nosotros somos los hombres machos y tenemos que cuidarlas de todo, renacuajo...

GABO: Yo la cuido de todo, hasta de ti...

ALEX: De mí no tienes que cuidarla

GABO: Si, porque eres muy pegajoso con ella, pareces lapa, papá

ALEX: Eso es porque la amo y quiero hacerle mimos, Gabriel. Quiero que ella sienta que es importante para mí. Además, ahora que está embarazada, tu mamá necesita que la apapachemos mucho. Ahora eres pequeño para entenderlo, pero cuando las mujeres se embarazan, se ponen tristes con facilidad, entonces, un hombre macho de verdad, lo que hace, es tratar de lograr que ella se sienta bien, amada y protegida

GABO: ¿Por eso pareces lapa?

ALEX: Exacto. Por eso y porque la tengo que cuidar mucho, al igual que a ustedes. A ti y a Jana también los abrazo y beso y no te enojas conmigo por hacerlo.

GABO: Porque ella es mi mamá y no quiero que la tengas para ti solo...

ALEX: A ver, Gabriel. Una cosa no tiene nada que ver con la otra. Dani siempre va a ser tu mamá, sin importar lo que pase conmigo. Por más que la llene de besos y de abrazos, esos son para mí. Ella tiene millones y millones de apapachos que son sólo tuyos y de nadie más.

GABO: Pero ya no pasa tiempo conmigo como antes, ahora se la pasa trabajando o contigo...

ALEX: Ahhhh, pero eso va a cambiar. Mira, hijo, cuando uno es grande, tiene responsabilidades y ahora que yo no puedo trabajar por la operación, mamá tiene que hacerse cargo. Ella es dueña de la empresa, ¿comprendes? Sin embargo, tu tío Jadel y algunos colaboradores como tu padrino, le van a echar la mano para que pueda estar más aquí y bueno, con Josefina en nuestra casa, mami podrá pasar más tiempo con todos nosotros. Por eso hay que obedecer a Fina, sabes que es como una madre para Dani, ¿no?

GABO: Si, mami nos lo dijo a mí y a Jana, antes que Finita viniera a vivir con nosotros, además yo la quiero mucho, es muy buena y hace unos pasteles que mmmm...

ALEX: ¿Son muy ricos? Cuéntame, yo no puedo comerlos... (Lo pone bien de frente a él) Gabriel, se que las cosas han estado raras y difíciles. Primero el embarazo de mamá, ahora esto de mi corazón y se que tienes miedo, pero Dani te ama con locura, hijo, como te amo yo y como amamos a Jana. Tú eres nuestro campeón, nuestro hombrecito macho y eso nunca va a cambiar, pase lo que pase, ¿si?

GABO: Si, papi, te quiero mucho (Lo abraza) Pero no le des muchos besos a mi mamá, que me la desgastas...

ALEX: Los besos no se desgastan. Es más, te digo un secreto, cuanto más besos das, más besos recibes...

GABO: ¿De verdad?

ALEX: ¡¡Claro!! ¿No ves que cuanto más besos le doy a mami, más me da ella? Y con tu hermana es igual, el único que no quiere que lo bese y abrace, eres tú

GABO: Porque soy un hombre macho y los hombres machos, no se dejan besar por otros hombres machos...

ALEX: ¡Eso es una bobada! Soy tu papá, renacuajo y es lo más normal que me des besos y me abraces

GABO: Te quiero, papi (Lo abrazó y le dio un beso) ¿Vamos a ver el partido?

ALEX: Por supuesto, campeón...